En una nueva clase de la Escuelita de Toma y Daca, el pedagogo de fuste Julián Elencwajg se refirió a las noticias económicas de la semana: cuotas, dólares y la posible anexión de Río de Janeiro y Montevideo.
¡Hola, chiques de les burbujes! ¿Cómo están? ¿Contentos porque ya se acerca fin de año y van a poder disfrutar del tiempo libre y tomarse vacaciones? Sus papis, que seguramente trataron de ahorrar de a poquito, tal vez estén un algo contrariados por la prohibición de que se puedan pagar pasajes al exterior en cuotas sin interés.
Quizás fantaseaban con la posibilidad de pasar unos días en Colonia, una de las atracciones más aburridas de Uruguay que es el destino elegido por las parejas antes de separarse, o en Buzios, un lugar ideal para tratar de hablar portuñol con otros argentinos que creen que el portugués es una versión chistosa del castellano, o en Viña del Mar, donde pueden disfrutar de la vida bohemia y la compañía de pinochetistas filonazis, y ahora están con una mezcla de furia y desilusión. Lo que sus papis deben saber, chiques, es que la pobre patria mía está atravesando un momento muy difícil por la falta de dólares y por eso es necesario dificultar que las familias trabajadoras puedan tomarse unos días de descanso en otro país.
Quienes siempre se sacrifican son los indicados para hacer un nuevo sacrificio porque ya tienen el hábito y saben de qué se trata. Hay que apelar a los experimentados, a quienes ya tienen el savoir faire, para salvar a este páramo aquejado por el mal de la extensión. Solo cuando los sacrificados que siempre se sacrifican se sacrifiquen las veces que haga falta y tengan un gesto de grandeza para proteger a quienes nunca se sacrifican de hacer un sacrificio que no está en su naturaleza habrá chances de salir adelante (...)