Familiares de Luciano Olivera, el adolescente de 16 años asesinado por un disparo de un policía de la Bonaerense en Miramar, señalaron este viernes que el efectivo acusado de haber cometido el crimen es un vecino del barrio. Además, el tío del joven indicó que ayer había sido el cumpleaños del efectivo acusado y que seguramente los agentes "estaban de joda y andarían pasados de drogas". La insólita versión de los policías.
Relatos de vecinos de la zona coinciden en que la policía local suele realizar controles de tránsito "sin luces y sin conos". Se trata de una práctica "bastante común" para "asustar a los pibes", afirmaron los habitantes de Miramar.
En el mismo sentido, familiares afirmaron en declaraciones a C5N que "la gran mayoría de las camionetas de la Policía no tienen patente ni los números de identificación a los costados" y que el supuesto puesto de tránsito en el que no se detuvo Luciano "no era un control fijo".
Por su parte, la prima del adolescente contó que este viernes a la mañana, cuando amigos y familiares se acercaron a la escena del crimen, la policía disparó balas de goma contra ellos. "Estábamos apoyándonos en este momento y empezaron a tirar balazos de goma", relató.
La versión policial
Según el sumario policial elaborado por el Comando de Patrulla de Miramar, el ataque a tiros sucedió a las 4 de la madrugada, cuando un patrullero intentó identificar a un joven que iba a bordo de una moto -una Yamaha YBR de 125 cc de color roja- y que se dio a la fuga al ser alertado en la zona de la plaza principal del partido de General Alvarado.
La versión de la Policía señala que en la calle 9 -entre 34 y 32-, Luciano Olivera es interceptado de frente por un móvil. En ese momento, el chico detiene su marcha y los agentes bajan del vehículo policial.
Según indica el sumario, el joven aceleró con su moto dirigiéndose hacia el oficial Maximiliano González, quien disparó su pistola reglamentaria Bersa calibre 9 mm. El tiro impactó en el tórax del chico y le causó la muerte.
Tras el episodio, se solicitó asistencia de una ambulancia que concurrió al lugar, donde la médica determinó el fallecimiento de Luciano. Momentos después, la fiscal a cargo de la investigación, Ana María Caro, dispuso la preservación de la escena del crimen. En tanto que el oficial González aseguró que disparó accidentalmente.
Por otra parte, el subsecretario de Seguridad del partido de General Alvarado, Antonio Centurión, confirmó en declaraciones al canal C5N que el arma reglamentaria del policía que quedó aprehendido por homicidio agravado fue secuestrada para realizar pericias y que no había arma alguna en poder del adolescente fallecido.
“El jefe de la Policía Comunal tomó conocimiento y automáticamente puso al efectivo a disposición de la Justicia y resguardó la escena hasta que vino el personal de la federal y se hizo cargo de la situación”, explicó Centurión.
El intendente de General Alvarado, Sebastián Ianantuony, repudió los hechos en diálogo con La García y aseguró que "queremos ver qué fue lo que sucedió y, en base a eso, la Justicia actuará".