El exministro de Trabajo bonaerense, Marcelo Villegas, ensayó un liviano pedido de disculpas luego de que saliera a la luz el video donde se lo observa en una reunión con empresarios de la construcción en la que habló de una "Gestapo, una fuerza de embestida para terminar con todos los gremios".
"Créeme que si yo pudiera tener --y esto te lo voy a desmentir en cualquier parte--, si yo pudiera tener una Gestapo, una fuerza de embestida para terminar con todos los gremios, lo haría", fue la frase pronunciada por el exministro de Trabajo de María Eugenia Vidal en un encuentro de 2017 del que tamibén formó parte el intendente de La Plata, Julio Garro.
La declaración Villegas la hizo ante otros funcionarios bonaerenses, un senador nacional, dos agentes de la AFI y varios empresarios del sector de la construcción. En ese encuentro, organizado en una sede del Banco Provincia de La Plata, aseguraba tener la estructura necesaria para poner en marcha una mesa judicial para perseguir sindicalistas.
Material "adulterado"
El exministro de Trabajo comenzó acusando al gobierno de difundir una grabación "ilegal". Aseguró que se presentará ante la justicia para dar las "explicaciones que corresponda". Además, sugirió que el material fílmico puede "estar adulterado".
"Lamento que aun en plena democracia se utilicen este tipo de prácticas ilegales y escuchas, que además de ilegales pueden estar adulteradas", sugirió Villegas en declaraciones al sitio web Infobae.
Tímidas disculpas
Luego, Villegas pidió "sinceras disculpas por haber utilizado torpemente una palabra absolutamente inadecuada". Dijo hablar sobre su referencia a la Gestapo, la policía oficial secreta de la Alemania nazi. "Está lejos de mi forma de sentir, de pensar y actuar", agregó.
Más allá de estas explicaciones, Villegas no hizo referencia al punto central del video: el armado de una mesa judicial con el objetivo de perseguir y encarcelar con causas armadas a dirigentes sindicales.
En este mismo sentido se expresaron varios dirigentes de la oposición, quienes repudiaron la utilización del término "Gestapo", pero evitaron hablar de la reunión en la que participaron los exfuncionarios con empresarios y aseguraron tener resulta la "cuestión judicial".
¿Cómo funcionaba la mesa judicial?
Durante la reunión los funcionarios macristas le aseguraban a los empresarios que tenían armada una mesa judicial. Hablaron de una estrategia coordinada con el Poder Judicial y avalada por "Nación y Provincia".
El objetivo era claro: impulsar una investigación en la que se logre el enjuiciamiento de diversas personas vinculadas a la práctica sindical, centralizada en la actividad de la construcción.
En un principio el modus operandi consistía en que las propias empresas generaran tensión con los trabajadores, por ejemplo, quitándoles las viandas, para que el sindicato paralice las obras.
Para llevar a cabo este proceso, tenían acordada una estrategia. En un primer momento, serían los propios empresarios quienes se dirigían al Ministerio de Trabajo. Allí llevaban notas previamente convenidas, que entregaban en mano a Villegas y luego al Poder Judicial.
En los escritos tenía que haber palabras "clave". Así, los funcionarios les decían que incorporen términos como "extorsión" y "amenaza".
"Las notas me las puedan hacer llegar a nombre mío, personal, confidencial, en mano. Avenida 7, las recibe Diego Visilio", les indicaba el exministro de Trabajo.
Una vez que la causa se abría, el Juez pedía al ministro pruebas y él aportaba todas las notas. Esas operaciones estaban acordadas previamente con la pata judicial.
