El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se recupera y no tendrá que ser operado. Así lo confirmó el parte médico difundido este martes por el hospital de San Pablo donde fue internado el lunes de urgencia, a raíz de una obstrucción intestinal.
"El cuadro de suboclusión intestinal se deshizo, no habiendo indicación quirúrgica", destaca el parte. Y agrega que "la evolución clínica y laboratorial del paciente continúa satisfactoria".
De este modo, desde el Hospital Vila Nova Star señalaron que el mandatario brasileño comenzará este martes "una dieta líquida". Si bien se destacó la recuperación de Bolsonaro, los especialistas aclararon que "aún no hay previsión de alta".
El presidente brasileño había posteado este lunes en sus redes sociales que los problemas intestinales que lo aquejan -y por los cuales ya se operó cuatro veces- tienen vinculación con el atentado del 6 de setiembre de 2018 durante la campaña electoral a la Presidencia, cuando fue apuñalado.
Este lunes por las madrugadas, el mandatario se sintió mal y tuvo que abandonar el estado de Santa Catarina, donde se encontraba vacacionando junto a su mujer y su hija, de urgencia. Fue llevado en el avión presidencial al hospital de San Pablo, donde permanece internado.