Alejandro Dolina narra en La Venganza Será Terrible la historia de Charles Guiteau, conocido por asesinar al presidente de los Estados Unidos James A. Garfield en 1881.
Guiteau nació en 1841 en Illinois y fue parte de la secta religiosa de la Comunidad de Oneida -quienes creían que Jesús ya había regresado y en un sistema de amor libre - hasta ser expulsado luego de cinco años.
Tenía aspiraciones políticas y creía erróneamente que el presidente James A. Garfield había sido elegido gracias a su ayuda tras escribir un discurso favorable a su candidatura y, entonces, tenía que ser recompensado con un importante cargo público.
Cuando Guiteau comprendió que no sería asignado al cargo político que él pensaba se merecía, decidió atentar contra la vida de Garfield: lo esperó en la estación de ferrocarril y le disparó a quemarropa por atrás.