Finalmente, no habrá reunión entre los gobernadores de Juntos por el Cambio con el ministro de Economía, Martín Guzmán, por la negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI). El gobernador Gerardo Morales, uno de los que pactó el encuentro con el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, se quejó en Twitter de la suspensión aunque, desde el Gobierno afirman que nunca hubo "fecha definida".
Morales cuestionó que el titular de la cartera económica “no quiere mostrar el ajuste que propondrá al FMI" y afirmó que la oposición había elegido tener "una actitud responsable" frente al preocupante endeudamiento del país. El encuentro ocurriría después de que el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, anunció que no asistiría por tratarse de una convocatoria "política" y el gobernador jujeño saliera a aclarar que el radicalismo enviaría representantes.
Ahora que se conoce la cancelación, Larreta juzgó que Economía no los "convocó". "Estábamos con toda la predisposición de participar con los gobernadores y los jefes de bloque", afirmó en conferencia de prensa.
Las presiones de Bullrich
La UCR estaba convencida de concretar el encuentro el lunes, pero el Gobierno jamás oficializó la reunión. La agenda oficial de Guzmán nunca lo reflejó. Por el lado del sector que responde a Patricia Bullrich hicieron todo para que el cónclave no ocurriera, de hecho, cuestionada a los miembros de la oposición que proponían asistir y buscaba ponerle condiciones al encuentro. Esa diferencia en la coalición de Juntos por el Cambio se sintió en la mesa nacional del partido, donde se notó el malestar.
En un comunicado, cuestionaron la primera presentación de Guzmán y exigieron que fuera al encuentro con los números finos de la negociación, entre otras cuestiones, como que estuvieran todos los jefes de bloque. También exigieron que la reunión, que inicialmente iba a ser en el Ministerio de Economía, se hiciera en el Congreso nacional.
Ahora Bullrich cambió el discurso y cargó contra el ministro de Economía y la gestión de Alberto Fernández por no concretar la convocatoria: "La suspensión de la reunión con el ministro de Economía confirma que este es un Gobierno con modelo de libro cerrado. Se hablan a sí mismos. Les pedimos información y nos queda claro que sólo quieren una aprobación con sometimiento. Y es lo que no vamos a permitir", indicó en su cuenta de Twitter.
Otros jefes del macrismo salieron a cuestionar la suspensión. El diputado nacional Mario Negri advirtió que se trata de "un final anunciado". "El ministro de Economía y el Gobierno sólo querían una reunión con la oposición para que los aplaudieran, sin informar nada. Están jugando con el futuro de los argentinos y de continuar así encaminan al abismo a todo el país", cuestionó.
El senador y exgobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, criticó que el gobierno "prefiere ningunear a la oposición y no mostrar el aparente acuerdo con el FMI. Todo esto los pinta de cuerpo entero, aunque a mi no me sorprenden".
En el Gobierno hay malestar. Fuentes del Ministerio de Economía aseguraron a Página/12 que no se suspendió ninguna reunión porque nunca se confirmó una fecha. "La supuesta fecha prevista para el martes no se basó en información oficial", indicaron.
