El drama ambiental en Corrientes no cesa. Dos años de una importante sequía sumados a las altas temperaturas registradas en enero fueron el "caldo de cultivo ideal" para los incendios forestales en la provincia, que siguen avanzando y ya dejaron más de 520.000 hectáreas fueron arrasadas por el fuego.
Algunas especies autóctonas de los Esteros del Iberá ya dejaron de verse por la zona y las llamas llegaron a zonas pobladas. Se espera que el domingo lleguen las lluvias.
El senador provincial de Corrientes José Ruíz Aragón aseguró en La García que "los incendios están pasando por encima de los Esteros del Iberá" y la situación es tan crítica que "se apaga el incendio en un lugar y se enciende en otro".
Además, Ruíz Aragón sostuvo que en la provincia "no hay previsibilidad" para contener los incendios y criticó que Corrientes no tenga una secretaría de Ambiente.
Por su parte Ricardo Mathó Meabe, séptima generación de productores correntinos, relató que el desastre provocado por las llamas es inmenso y lamentó en declaraciones a Radio la Red que "la recuperación va a ser muy lenta", porque el panorama representa un retroceso de 20 años.
Además, según señaló Mathó Meabe, los aviones de la provincia que intentan apagar el fuego no son los adecuados. En vez de tratarse de aviones específicos para combatir incendios forestales, las tareas se hacen con aviones de fumigación agrícola, que pueden cargar menos cantidad de agua.
"Con uñas y dientes estamos tratando de salvar nuestra tierra", contó el productor agrícola y lamentó que cuando se logre apagar el fuego quedarán fundidos. El pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional anuncia lluvias para todo el territorio correntino desde el domingo y por siete días.
