En América Latina y el Caribe las mujeres acceden a menos de tres cuartas partes de los derechos legales que se otorgan a los hombres, según el informe La Mujer, la Empresa y el Derecho 2022, presentado por el Banco Mundial.
El estudio mide las leyes y regulaciones de 190 países en áreas vinculadas a la movilidad, trabajo, remuneración, matrimonio, parentalidad, empresariado, activos y jubilación. América Latina está bien posicionada en cuanto a los activos, con una puntuación promedio de 97,5, a la movilidad con 92,2 y al matrimonio 90,6.
Sólo dos economías regionales promulgaron reformas el año pasado: Argentina y Colombia. En el caso argentino se contabilizan los períodos de ausencia por cuidado infantil en las prestaciones de jubilación. Colombia introdujo la licencia parental remunerada, con el objetivo de reducir la discriminación contra las mujeres en el lugar de trabajo.
El caso colombiano es el primero en América Latina en reconocer este derecho. El informe señala que “las leyes que promueven la licencia remunerada para los padres pueden reducir la discriminación en el lugar de trabajo”.
De las 32 economías de América Latina, 19 no tienen leyes que garanticen 14 semanas de licencia de maternidad paga y sólo la mitad garantiza algún tipo de licencia remunerada para los padres. Solo 11 países de la región exigen igual remuneración por un trabajo de igual valor.
Desigualdad de oportunidades en el mundo
A nivel mundial, unas 2400 millones de mujeres en edad de trabajar no tienen igualdad de oportunidades económicas y 178 países les impiden participar plenamente en la economía por las barreras legales.
En 86 países, las mujeres enfrentan algún tipo de restricción laboral, y 95 países no garantizan la igualdad de remuneración por un trabajo de igual valor.
La directora de Políticas de Desarrollo y Alianzas del Banco Mundial Mari Pangestu señaló que "los gobiernos deben acelerar el ritmo de las reformas legales, para que las mujeres puedan desarrollar todo su potencial y beneficiarse de manera plena y equitativa".
Pangestu explicó que "si bien se han logrado avances, a nivel mundial la brecha entre los ingresos esperados tanto de hombres y mujeres a lo largo de su vida es de 172 billones de dólares, casi dos veces el producto interno bruto (PIB) anual del mundo".