La Agencia Internacional de la Energía (AIE) informó este miércoles que las emisiones globales de dióxido de carbono generadas por el sector energético llegaron al nivel más alto de la historia en 2021.
Durante ese año las emisiones aumentaron un 6 por ciento (respecto el 2020) y alcanzaron las 36.300 millones de toneladas generadas, de acuerdo con el informe de la AIE.
El incremento de las emisiones del principal gas de efecto invernadero en más de 2.000 millones de toneladas supone el mayor incremento en la historia en un año en términos absolutos, por encima de 2020.
La recuperación de las actividades provocó una mayor demanda energética a lo largo del año pasado y se produjo en un contexto de meteorología y condiciones del mercado energético adversas. Esto hizo que hubiera una mayor quema de carbón para producir energía, a pesar de que la generación de energías renovables también tuvo un mayor crecimiento histórico.
El carbón representó el 40 por ciento del crecimiento de las emisiones energéticas globales en 2021, alcanzando su máximo histórico en 15.300 millones de toneladas.
China, a la cabeza
Las emisiones provenientes del petróleo permanecieron más bajas que los niveles pre-pandemia, con 10.700 millones de toneladas, a causa de la recuperación limitada de la actividad del transporte durante 2021.
Según el informe de la AIE atribuyó el repunte de las emisiones globales de CO2 por encima de los niveles prepandémicos a China, donde aumentaron en 750 millones de toneladas de 2019 a 2021.