“A nuestros queridos hijos e hijas detenidos desaparecidos, a los sobrevivientes de los centros de detención clandestinos, a los presos políticos, a los exiliados, a todos aquellos que padecieron, y de qué manera, ese genocidio que asoló al país durante los años 70 y parte de los 80”. Con esas palabras, la presidente de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Taty Almeida, se refirió a la conmemoración de este jueves, al cumplirse 46 años de la última dictadura militar en Argentina.
“Hay que tener muy presente por qué marchamos los 24 de marzo. Es nada más y nada menos que para recordar. Siempre están al lado nuestro los 30.000, pero con más razón un 24 de marzo”, sumó.
“Este es un 24 de marzo muy especial después de dos años de pandemia que no podíamos salir a la calle y ahí estamos. Dentro de un rato bajamos, caminando, en silla de ruedas… a pesar de los bastones y las sillas de rueda, las locas seguimos de pie”, agregó.
Sobre las conmemoraciones de 2020 y 2021, cuando regía la cuarentena por la pandemia de covid, Almeida recordó que, a pesar de no poder marchar en las calles, “nos ingeniamos y mucha gente se ingenió para que el 24 los 30.000 estuvieran presentes. Por ejemplo con el pañuelazo, pero no es lo mismo que, codo a codo, salir a gritar. Tenemos que demostrar con hechos, no con intenciones, que un pueblo unido jamás será vencido”.
La interna del oficialismo
“Y que se dejen de embromar con que es una marcha partidista”, sumó Almeida en referencia a las movilizaciones de este jueves. “No es partidista, ahí está el pueblo que no quiere que nunca más tengamos, por ejemplo, un gobierno neoliberal”.
“Por eso hay que tener mucho cuidado, cuidar a este gobierno que tanto nos costó conseguir, nacional y popular. Con errores, sí, falta mucho, pero es muy importante discutir, disentir, eso no es pelearse. Tiene que ser siempre una crítica constructiva, tenemos que estar unidos pero no de la palabra para afuera, con los hechos demostrar que estamos unidos, porque no podemos soportar nuevamente un gobierno neoliberal”, dijo adentrándose en la interna que atraviesa al oficialismo.
Y con respecto al tratamiento de los derechos humanos y los desaparecidos durante el gobierno de Mauricio Macri (2015-2019), sentenció: “Macri faltó el respeto permanentemente a la memoria de nuestros hijos. Que no son 30.000, que ahora se les va a terminar el curro a los organismos de derechos humanos. El creyó que iba a lograr que la memoria desapareciera, de una manera muy burda, pero nunca se imaginó que se iba a encontrar con esa muralla de resistencia. No va a poder con nosotras, ni con un pueblo que tiene memoria”.