El Papa Francisco denunció este miércoles las "nuevas atrocidades" de la guerra de Ucrania, como la "masacre de Bucha", en referencia los crímenes de civiles por los que el gobierno de ese país acusa al Ejército ruso.

"Las recientes noticias sobre la guerra en Ucrania, más que traer alivio y esperanza, muestran, en cambio, nuevas atrocidades, como la masacre de Bucha", denunció el pontífice durante la Audiencia General de los miércoles en el Vaticano.

Para el Papa, la guerra muestra "crueldades cada vez más horrendas, cometidas contra civiles, mujeres y niños indefensos". Por este motivo pidió que "se ponga fin a esta guerra, que se hagan callar las armas, que se deje de sembrar sangre y destrucción".

Zelenski pidió que excluyan a Rusia de la ONU

El martes, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, pidió la exclusión de Rusia del Consejo de Seguridad de la ONU por cometer los "peores crímenes de guerra" desde la Segunda Guerra Mundial, tras acusarla de llevar a cabo una masacre de civiles en Bucha, ciudad vecina a Kiev.

Las autoridades de Rusia rechazaron las acusaciones y afirmaron que esas denuncias son una "provocación falaz que sirve para encontrar un pretexto para torpedear las negociaciones de paz".

Tras denunciar los actos de Bucha, el Papa desplegó ante los miles de fieles que lo acompañaron una bandera ucraniana. "Esta bandera viene de la guerra, de esa ciudad martirizada, Bucha", detalló el pontífice.

"También están aquí algunos chicos de Ucrania que nos acompañan. Saludémoslos y recemos junto a ellos. Estos niños debieron escapar y llegar a una tierra extraña", dijo antes de darles un huevo de Pascua a cada uno.

"Esto es uno de los frutos de la guerra, no los olvidemos y no olvidemos al pueblo ucraniano. Es duro ser erradicado de la propia tierra por una guerra", lamentó.