La Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido (UKHSA) anunció este miércoles que reactivará una campaña de vacunación contra la poliomielitis en menores de entre nueve meses y los 12 años, luego de que el virus fuera detectado en aguas residuales de Londres.
Declarado erradicado en el Reino Unido en 2003, el virus fue detectado unas 116 veces en aguas de alcantarillado durante estudios conducidos en las instalaciones de la metrópolis, en particular, en ocho barrios situados al norte y el este.
El ministro de Salud, Steve Barclay, aseguró a los londinenses que "ninguno fue diagnosticado con el virus" y los riesgos para la población (en gran parte vacunada) son muy bajos.
El titular de la cartera de salud de Inglaterra afirmó que "la NHS, el servicio sanitario público, encamina una campaña de vacunación suplementaria y aconseja a los padres aprovechar la ocasión cuando sea ofrecida".
"Todos los niños de uno a nueve años necesita ahora una vacuna, ya sea como refuerzo o para estar al día con sus vacunaciones", afirmó la experta en epidemiología de la UKHSA, Vanessa Saliba.
Y agregó: "El riesgo de contagio para la mayoría de la población que está vacunada es bajo, pero es vital que los padres se aseguren que sus niños están totalmente vacunados".
El objetivo del programa es reducir el riesgo de que un menor pueda contagiarse y también aumentar el nivel de inmunidad a fin de hacer más difícil que el virus pueda propagarse.
En Nueva York, advierten que “puede haber cientos de personas infectadas” con polio
En Estados Unidos podrían ser centenares o miles los casos de poliomielitis no diagnosticados, aseveró la doctora Patricia Schnabel Ruppert, comisionada médica para el condado de Rockland, después de que el mes pasado un hombre no vacunado quedó paralizado a causa del virus.
"La incidencia de la poliomielitis paralítica es inferior al 1%", explicó la médica y agregó que la mayor parte de los casos es "asintomática o levemente sintomática y a menudo estos síntomas son ignorados".
La advertencia de las autoridades llegó poco después de que se detectara el virus en siete muestras de aguas residuales de un suburbio neoyorquino.
“Con base en brotes anteriores de polio, los neoyorquinos deben saber que, por cada caso de polio paralítico observado, puede haber cientos de otras personas infectadas”, advirtió por su parte la comisionada de salud del estado, la doctora Mary Bassett.
Y continuó: "El departamento está tratando el caso único de polio como la punta del iceberg de una propagación potencial mucho mayor."
¿Qué es la poliomielitis?
La poliomielitis es una enfermedad muy transmisible causada por el virus polio, que puede ser grave y afecta con mayor frecuencia a lactantes y niños/as menores de 5 años.
Se transmite principalmente por el consumo de sustancias contaminadas con el virus (que se encuentra en la materia fecal) y por contacto directo con personas que pueden contagiar la enfermedad.
Algunos casos son leves; otros son mucho más graves y causan discapacidades físicas permanentes.
Los síntomas pueden ser leves y similares a los de la gripe: fatiga, fiebre, dolor de cabeza, rigidez, dolor muscular y vómitos. Y pueden tardar hasta 30 días en aparecer, tiempo durante el cual una persona infectada puede transmitir el virus a otras personas.
La enfermedad se puede prevenir a través de la vacunación. En Argentina, el esquema de vacunación se compone por 3 dosis de vacuna IPV (vacuna antipoliomielítica inactivada inyectable) o Salk: a los 2, 4 y 6 meses de edad, y un único refuerzo al ingreso escolar con vacuna IPV o Salk.