La comunidad educativa de la escuela primaria Organización de Estados Americanos y del jardín El Tranvía de Caballito se encuentra en estado de alerta. Esta semana las familias se enteraron por la Asociación Gremial de Trabajadores del Subterráneo y Premetro (AGTSyP) que se encontró asbesto en los talleres Bonifacio y Polvorín, ubicados junto a los dos establecimientos estatales con una chimenea de un horno del taller que da directamente al patio del colegio y del jardín. La dirección de la escuela elevó un pedido para que se detenga el funcionamiento del horno "hasta que se pruebe que no afecta la salud" y pidió el retiro de los materiales con asbesto. Fuentes de Subterráneos de Buenos Aires (SBASE), en tanto, niegan que el asbesto pueda llegar al colegio.
La noticia llegó a las familias el lunes de esta semana luego de que las conducciones del colegio y del jardín, que funcionan en edificios vecinos, elevaran una notificación a la Supervisión del Distrito Escolar N°8. El texto indicaba que el viernes de la semana pasada se habían acercado integrantes de la Secretaría de Salud Laboral de la AGTSYP para dar aviso de las conclusiones a las que llegó un estudio realizado en los talleres Polvorín y Bonifacio, ubicados en José Bonifacio entre Emilio Mitre y Del Barco Centenera, en pleno barrio de Caballito. "Los resultados indican que en los talleres se encuentran materiales con amianto (asbesto) que contaminan el ambiente y son nocivos para la salud de los expuestos", explica la nota.
Fuentes de esa Secretaría de Salud Laboral precisaron a Página/12 que el estudio comenzó en 2018 con la recolección de muestras, y el contacto con la dirección del colegio llegó a través de una madre de la cooperadora. "Hicimos una recorrida, les mostramos lo que hay en el taller, del otro lado, y les comentamos la cantidad de positivos que tenemos detectados en la flota guardada dentro del taller y en el techo", indicaron.
En la notificación elevada a la Supervisión, la conducción del colegio sostuvo que "los materiales tóxicos son, entre otros, un extenso techo con amianto, gran cantidad de chatarra, vagones, y un horno activo que arroja humo con restos de asbesto hacia los patios". En el lugar se guardan vagones con presencia de asbesto de diversas marcas, como Mitsubishi, Gee, Fiat, Nagoya y Le brugeoise.
La noticia de la presencia del material potencialmente cancerígeno generó revuelo e incertidumbre en los padres y madres de los casi 400 chicos y chicas que asisten al colegio y al jardín. "Nadie sabe cómo manejarse. Los chicos no pueden salir al patio ni abrir las ventanas. Bajó a la mitad la cantidad de alumnos que asisten, porque no están yendo por precaución", contó a este diario Leticia Rodríguez, madre de una alumna del jardín, sobre la situación que atraviesa la comunidad educativa.
El martes, unas cien familias pudieron encontrarse por videollamada con los directivos, representantes del sindicato y de los gremios docentes. Según detalló Rodríguez, en esa reunión virtual les explicaron que "descubrieron asbesto en los galpones cercanos, en Polvorín hay vagones viejos que ya se sabía que tenían y están esperando que los hagan chatarra. El otro taller es subterráneo, con hornos, y las chimeneas dan al patio del colegio y del jardín". "Participamos en la reunión y se dio un paneo haciendo la diferenciación en los niveles de exposición: nosotros tenemos una exposición laboral y el colegio tendría una exposición ambiental", aclararon las fuentes de la Secretaría.
Rodríguez, en tanto, subrayó que en esa reunión "no hubo nadie del Gobierno porteño, nadie dio una respuesta al tema. Pedimos de manera urgente que se dejen de usar los hornos y que se empiece con la remoción, estamos con mucha incertidumbre". En efecto, en el encuentro se decidió elevar el pedido para la detención del horno, reclamo que acompaña la asociación cooperadora, que también junta firmas de apoyo de integrantes de la comunidad educativa.
Según comunicó la dirección del colegio a las familias, este viernes elevará la solicitud formal, a la que le sumará la exigencia del "retiro cuidadoso, programado, pronto y con aviso a las escuelas del resto de materiales positivos de asbesto". La dirección precisó que en el informe de la AGTSYP "se dice que el horno potencialmente contiene una composición de asbesto en mal estado", por lo que requiere la suspensión de ese horno "hasta que se pruebe que no afecta la salud de alumnos/as, trabajadores y visitantes de los edificios escolares".
Voceros de SBASE, sin embargo, negaron que el asbesto pueda llegar al patio a través de la chimenea. Sin embargo, sí confirmaron que en los talleres funciona un "depósito transitorio para residuos con asbesto" en proceso de eliminación, fuentes de la empresa estatal sostuvieron a este diario que no hay posibilidad de que "el asbesto se queme y pase por la chimenea a la atmósfera". Así y todo, anticiparon que este viernes tomarán muestras del horno y se hará una nueva medición "para llevar mayor tranquilidad a la comunidad educativa". Según afirmaron, el trabajo del taller "se enmarca en el plan de desasbestizado" y "cumple las normas de seguridad para el tratamiento de este tipo de material".
Por la presencia de asbesto en las formaciones de subte existe un litigio judicial que tramita desde que en 2019 el sindicato presentó una acción de amparo ambiental. "Tiene dos cautelares a favor y la última dice que SBASE y el GCBA tienen que informar sobre la presencia de asbesto. En todas las comunas debería haber un cartel diciendo dónde hay asbesto e informando sobre el amparo, algo que al día de hoy no se cumple", advirtieron las fuentes de la Secretaría.