La crisis que desató Elisa Carrió hacia el interior de las distintas fuerzas políticas que integran Juntos por el Cambio está intentando ser controlada. Por un lado, los principales referentes del PRO se encontraron en un coqueto restaurante de la costanera norte. Allí, Mauricio Macri, Patricia Bullrich, Horacio Rodríguez Larreta y Cristian Ritondo, entre otros, decidieron --y así lo dieron a conocer-- ponerle fin al episidio Carrió. Sin embargo, los rostros de los comensales no decían los mismo. Los que todavía están que trinan son los radicales.
El almuerzo del PRO tuvo un condimento especial: allí habría de definirse cuál sería el discurso público del PRO ante los dichos de Carrió. Para dar el mensaje, el desingado fue el exsecretario general de la Presidencia durante el macrismo, Fernando De Andreis. “Damos por finalizado el tema", dijo sin dar más pistas. La misma respuesta siguió a casi todas las preguntas realizadas por los periodistas que asistieron a la salida del mitin. De Andreis intentó, además, dejar claro que no está comprometida la unidad del espacio, ya que aseguró que “de ninguna manera va a haber una ruptura”. Aunque también afirmó que “por supuesto” que molestaron los dichos de Carrió y que será “una decisión de cada uno” judicializar el tema.
Pero no todos los referentes del PRO están alineados a este llamado a la calma. El exministro de Educación, Esteban Bullrich, publicó un mensaje en Twitter en el que aseguró: “Estamos dando un espectáculo lamentable”. Y agregó que “impunidad es también creer que uno puede decir cualquier cosa sobre los demás”. El martes próximo habrá una mesa nacional de Juntos por el Cambio, en la que los dichos de Carrió serán un tema central a tratar, a pesar de la tregua que impulsan desde el PRO.
Los radicales
Uno de los principales apuntados por la exlegisladora fue el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales. En declaraciones radiales, el titular del radicalismo dijo que la dirigente "a veces se excede" y consideró que "no está bien descalificar a los dirigentes de Juntos por el Cambio".
Para Morales, los dichos de Carrió lastiman la imagen pública del espacio: "si Lilita tiene dudas, sospechas, las tiene que hablar hacia adentro, pero no generar acusaciones que creo que no contribuyen a nada". De esta manera, el mandatario aseguró que el martes próximo habrá una reunión con la exdiputada para hablar de la situación y “evitar este tipo de peleas, que no sirven para nada”.
Por otra parte, el gobernador habló de “ese fantasma de incorporar a Sergio Massa”, en referencia a las últimas acusaciones de Carrió, quien sugirió que la designación del ministro de Economía sirvió para reafirmar la unidad de Juntos por el Cambio, ante un potencial intento de sumar al tigrense al espacio. "Dice que esto se hace para evitar un acuerdo con Massa en el futuro, cuando nadie planteó eso, ningún dirigente planteó eso como sí ocurrió en 2015", afirmó Morales que tiene como vicegobernador a Carlos Haquim del Frente Renovador.
Dentro de la UCR también se manifestó el senador Martín Losteau, quien lamentó las expresiones de Carrió y aseguró que “generan más angustia y sufrimiento”. El economista sostuvo que este “es un mal momento porque agrega incertidumbre” al potencial electorado. Losteau no especificó nombres con los cuales podrían realizarse alianzas de cara a la disputa de 2023, pero rechazó las imposiciones de la líder de la CC-ARI: “No se puede decir con quién se puede hablar y con quién no”, dijo.