Los bomberos de Roma rescataron el pasado jueves a un hombre que quedó sepultado durante ocho horas mientras excavaba un túnel ilegal en una calle céntrica de la capital italiana, Vía Innocenzo XI, próxima al Vaticano.
Tanto la policía como los vecinos sospechan que podría tratarse de un ladrón que, junto a otras tres personas, pretendía robar un banco.
Los vecinos del lugar señalaron que el túnel excavado empezaba en un comercio vacío que había sido alquilado recientemente.
Fueron los propios miembros de la supuesta banda delictiva quienes alertaron a las autoridades cuando, en medio de las excavaciones, se desprendió un trozo de asfalto que dejó atrapado a uno de ellos a 6 metros de profundidad. Así, un llamado a la policía informó sobre una persona atascada en un túnel en la calle Innocenzo XI, cerca de la basílica de San Pedro.
Para encontrar al hombre y completar el rescate, los bomberos tuvieron que cortar una calle y trabajar durante ocho horas.
Los medios locales catalogaron a los supuestos delincuentes como "La Banda del Hoyo", mientras que el hombre que quedó atrapado fue identificado como Andrea Grassi, de 33 años.
Grassi fue trasladado al hospital Gemelli, donde fue operado y estabilizado. En los próximos días será interrogado por los delitos de daños y derrumbe negligente, al igual que las otras tres personas que fueron detenidas cerca del lugar del pozo.
En los próximos días, también se escuchará al propietario del local vacío donde comenzó la excavación y que había sido alquilado recientemente.
La investigación apunta a que la banda quería dar un golpe en uno de los dos bancos ubicados cerca del túnel y que estaban aprovechando que la ciudad está prácticamente vacía por el fin de semana largo, debido al feriado del 15 de agosto.