Hoy es feriado y Malena lo sabe. Nada mejor que hacer una rica comida y escuchar la música más linda del mundo, el tango.
Los Especialistas Gastronómicos de Malena (ese simposio de pendencieros pero tiernos comensales), luego de un arduo debate, se inclinaron por el Revuelto Gramajo. Por un lado, por lo hermoso de sus varios orígenes (desde el ficticio pero tierno del edecán de Roca hasta el verdadero que es la creación de dos hermanos Gramajo, bon vivants de la década del 20...1920) Por el otro, por la sencillez. Y por último, por ser una explosión de saber y tradición.
¿Qué se necesita? El original, dicen, que llevaba sólo cuatro cosas
- Papa
- Huevos
- Jamón
- Tango
Pero el tiempo le agregó cebolla y arvejas (y en algunas recetas otras cosas más...)
Vamos con la receta Malena de Revuelto Gramajo
1- Pelar las papas finitas, tipo Papas Pay. Aceite a 180 grados y se ponen a freír hasta que estén doradas. Se aconseja escuchar a todo volumen alguno de estos dos tangos
La Papita
Quiero Papita
2- Cortar las cebollas en tiritas. Se cocinan en una sartén junto con arvejas. Sal y pimienta generosa, depende su hipertensión.
3- Se colocan 3 huevos en un recipiente y se los mezcla hasta que estén unidos (pero no muy dominados). No es necesario batir, como nos enseña el tango Dandy
4- Al recipiente con los huevos se le agrega la preparación de cebolla y arvejas. Le sumamos unas generosas tiritas de jamón cocido.
5- Se combinan todos los ingredientes en una danza comandada por una cuchara de madera. Los huevos, el jamón, la cebolla, la arvejas y aquellas papas del comienzo...Todos sabemos cómo debe estar el fuego, nos los ensenó Salgán...
De ahí en más es la magia del Revuelto, el lograr ese punto justo donde todos los elementos danzan y se regalan en la mesa.
Lo único que falta es compartir con la gente que más quiera y sobre todo, subir el volumen a nuestro streaming con 24 horas de tango para que el plato sea completo