En la Villa 1-11-14 estaba todo listo para que comenzara la conferencia de prensa de la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich. Los 2200 efectivos de Gendarmería, Policía Federal y de la Policía de la Ciudad que participaron de los allanamientos, todavía con los cascos puestos y armas en mano, esperaban firmes alrededor de la droga secuestrada, dispuesta en hileras en el medio de la calle. Al lado de Bullrich estaba el jefe de la Federal, Néstor Roncaglia, quien después de un gesto de fastidio llamó a la ministra y le señaló la copa de un árbol: colgado entre las ramas, un hombre gritaba cosas a la funcionaria, que se vio obligada a postergar por unos minutos sus declaraciones ante las cámaras. Lo que los sorprendió tanto a ella como a Roncaglia no fue la presencia de un borracho que se sacudía entre las hojas del árbol, sino que a ese mismo hombre, un rato antes, lo habían convencido de bajar del árbol por cincuenta pesos. El hombre bajó, compró una gaseosa y volvió a su árbol para empezar una segunda negociación.
Esta situación coronó el operativo realizado por las tres fuerzas en conjunto durante la madrugada de ayer, que consistió en 95 allanamientos en la villa ubicada en el Bajo Flores porteño, tras los que fueron detenidas 18 personas. Durante los allanamientos se secuestraron 503 kilos de marihuana, 50 kilos de cocaína, 5 mil dosis de paco y 400 gramos de pasta base, además de ametralladoras, fusiles, pistolas, detonadores y una máquina de contar billetes, aseguraron voceros del Ministerio de Seguridad.
La investigación, a cargo del juez federal Sergio Torres, indicó que los detenidos formaban parte de dos bandas narco que están en disputa por el control de la venta de droga en el barrio. Por ese motivo, dijeron los voceros, se realizó el operativo de ayer, para atrapar a la mayor cantidad de integrantes de las organizaciones. Una de estas bandas, según la investigación, es dirigida por Marco Estrada González y su esposa Silvana Salazar, quienes están detenidos desde diciembre en las cárceles de Marcos Paz y Ezeiza respectivamente. Por eso ayer también se allanaron sus celdas en busca de celulares y otros elementos. Entre las personas detenidas en el operativo de la villa 1-11-14 están la suegra y el hermano de Estrada González.
“Tenemos presa a toda la banda de Estrada González, que es uno de los que trabajaba acá y está preso en la cárcel de Ezeiza. Su suegra seguía manejando la organización y ha sido detenida por la Policía Federal Argentina. El jefe de la ‘Banda de Los Paraguayos’ ha sido detenido también por la Gendarmería Nacional”, aseguró la ministra Bullrich. La funcionaria detalló, además, que si bien los líderes de esta banda, Roberto “Orejón” Cardozo y Sergio Brítez, ya estaban presos, ayer detuvieron a uno de sus lugartenientes, al que se le encontraron seis cartuchos con 93 gramos de Pentolita, un explosivo utilizado en minería pero que es muy usado por la guerrilla colombiana. El operativo, señaló la ministra, se realizó en el marco del programa “Barrios Seguros”, que asigna la custodia de algunas “zonas conflictivas” a Gendarmería.
Por su parte, el jefe policial Roncaglia detalló que el operativo de ayer demandó seis meses de investigaciones impulsadas por el juez Torres, que tiene a su cargo dos causas por narcotráfico vinculadas al asentamiento, durante los cuales la Policía Federal se encargó de investigar a la banda liderada por Estrada González, mientras que Gendarmería se abocó a la otra banda. “Marco (Estrada González) sigue siendo el líder de la banda, su mujer presa también y la suegra, que fue detenida esta mañana”, señaló el jefe de la Federal, y agregó que “la suegra de ‘Marcos’ ocupó su lugar (en la organización) cuando fueron detenidos junto con su esposa”, en diciembre del año pasado.