"Ya es momento de hacer un paro nacional". Con estas palabras, Sergio Palazzo marcó su postura respecto de lo que el sindicalismo debe hacer ante la política económica y social del gobierno de Mauricio Macri. Para el secretario general de La Bancaria, la medida de fuerza debería ser “antes de las elecciones de octubre”.
En declaraciones a FM La Patriada, el dirigente sindical fue crítico de la postura que adoptó la conducción de la CGT: “Hoy tiene un rol pasivo frente al Gobierno”. Urgió a la conducción cegetista a que “retome el plan de lucha que votó en abril” y expresó su malestar: "La CGT planteó un salario mínimo de 15 mil pesos, acorde a la canasta de alimentos, y el Gobierno respondió, por primera vez en la historia, con un decreto para decidir unilateralmente una suba". Lo afirmó en relación a la suba salarial por decreto que fijó en 10 mil pesos los sueldos mínimos.
“Reconocen en índices oficiales que para no ser pobre se necesitan casi 14 mil pesos y deciden subirlo a 10 mil el año que viene. Lo que hacen es consolidar la inequidad y la pobreza", agregó el titular del gremio bancario, para quien "el movimiento obrero tiene una responsabilidad histórica para que se frenen estas políticas de ajuste. No puede ser que ante las medidas del Gobierno la CGT mire la situación tan tranquilamente”.
Juan Carlos Schmid, uno de los triunviros que lideran la CGT, había dicho el jueves que la conducción de la central obrera evaluará la próxima semana los pasos a seguir, mientras que otro triunviro, Rodolfo Daer, dijo que los trabajadores decidirán si se responderá al gobierno con “una gran movilización o un paro nacional”.
Palazzo cerró pidiendo la unidad “para enfrentar las políticas de ajuste de Macri”. Los dichos del dirigente gremial no son nuevos, de hecho ya lo había planteado el pasado jueves durante el Congreso Ordinario Anual del sindicato que conduce. En aquella ocasión Palazzo afirmó ante los congresales que "la compulsa electoral no debe ser óbice para continuar defendiendo los derechos de los trabajadores. La Bancaria y la Corriente Federal exigen que la CGT convoque de inmediato a un Confederal para determinar la fecha de su prosecución", indicó.
El referente de la Corriente Federal que no tiene cargos de la central obrera por decisión propia, afirmó que "el Congreso fue muy claro y, los delegados de las 53 seccionales, analizaron durante dos jornadas la realidad política y económico-social de la Argentina, al igual que la situación de la actividad bancaria. El país adoptó un rumbo que perjudica a los trabajadores y, el avance tecnológico, la economía y esa desregulación, tendrá consecuencias en el corto tiempo". Los delegados al congreso terminaron por delegar en Palazzo a trabajar en "la revisión paritaria a realizarse en julio próximo -como se determinó en enero último- que todo avance tecnológico y desregulatorio sea discutido en esa mesa convencional y también adoptar las medidas de fuerza necesarias si los reclamos no son escuchados y hay despidos".