Si antes del regreso de Julio César Falcioni a la dirección técnica, Independiente perdía seguido, ahora no pierde: empata, pero tampoco puede ganar. En Mendoza (donde sólo pudo vencer una vez en catorce presentaciones oficiales) igualó 1 a 1 con Godoy Cruz. Un resultado que volvió a dejar un sabor amargo en los paladares rojos de Avellaneda. Porque los mendocinos lo lograron jugando con un hombre menos durante casi todo el segundo tiempo, tras la expulsión del paraguayo José Canales.
Independiente ganaba 1 a 0 con un gol de cabeza de Juan Manuel Insaurralde a los 41 minutos de la primera etapa tras un centro de Alan Soñora desde la izquierda. Y tras la salida de Canales los cuatro minutos del complemento (empujó a Banegas estando ya amonestado), parecían dadas las condiciones para la victoria. Pero no fue así: seis minutos más tarde y en la primera pelota que tocó (había entrado por Burgoa), el cordobés Tadeo Allende sacó un derechazo ajustado que picó adelante del arquero Milton Alvarez y se metió al lado del poste izquierdo. Después, el Rojo quedó expuesto en todo lo que viene faltando desde bastante tiempo a esta parte.
La falta de volumen de juego, el manejo impreciso de la pelota que los lleva a errar pases sencillos y las individualidades que acompañan pero que no se hacen cargo de la situación fueron debilitando a Independiente que nunca pudo remarcar ese jugador de más que tenia. Falcioni hizo solo dos cambios: entraron Hachen por Lucas Romero y luego el juvenil Pozzo por Leandro Fernández. Pero no hubo caso: el Rojo nunca levantó vuelo. Aun así, tuvo las únicas situaciones del segundo tiempo: un derechazo de Soñora desde buena posición que se fue por encima del travesaño y casi sobre el cierre del partido, un remate de Insaurralde que el arquero Diego Rodríguez (exIndependiente) manoteó por encima del travesaño.
Godoy Cruz se mantuvo competitivo en base a su orden y sin necesidad de tirarse atrás. Cuando se fue expulsado Canales, se reacomodó tirando a Abrego como lateral derecho y corriendolo a Pier Barrios como primer central. Once contra once y a partir de algunos jugadores de buen pie como el propio Abrego, Ojeda, Burgoa y Bullaude (transferido al Feyenoord de Holanda en 7 millones de euros por el 90 por ciento del pase) hizo correr mejor la pelota y construyó algunas llegadas peligrosas. Diez contra once eligió quedarse donde estaba y darse por satisfecho con el empate.
El partido además tenía una importancia adicional para Independiente: Godoy Cruz es uno de los equipos que está ingresando a la Copa Sudamericana 2023 y el Rojo podía haber achicado la distancia de haberle ganado. Ahora en la tabla anual quedaron a 11 puntos (30 a 41). Y aunque faltan doce fechas para el cierre de la temporada da toda la impresión de que será muy dificil reducir esa brecha. Independiente marcha a los tumbos por el campeonato (está en el puesto 24 entre 28 equipos) y ya no quedan herramientas en la menguada caja de herramientas que dispone Falcioni. Más que esto no tiene.