Los líderes de Estados Unidos, Francia, Alemania y Reino Unido pidieron "contención militar" alrededor de la central nuclear ucraniana de Zaporiyia, la más grande de Europa, después de que en las últimas semanas Moscú y Kiev se acusaran mutuamente de ataques cerca de la planta. En la charla, los cuatro dirigentes occidentales también "acordaron que se mantiene el apoyo a Ucrania en su defensa ante la agresión rusa".
El presidente estadounidense Joe Biden y el francés Emmanuel Macron, el canciller alemán Olaf Scholz y el primer ministro británico Boris Johnson pidieron en una conversación telefónica conjunta el envío rápido al lugar de una misión de inspectores del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), según un comunicado común. Para que esa visita se pueda llevar a cabo, Macron estuvo discutiendo por teléfono el viernes con Vladimir Putin y, de acuerdo con su gabinete, consiguió el acuerdo del presidente ruso para que las condiciones que se fijen tengan el visto bueno tanto de las autoridades ucranianas como de la ONU.
La presencia del frente en las proximidades de las instalaciones de Zaporiyia, que está desde marzo bajo el control de los rusos, y las operaciones militares que se llevan a cabo allí, hacen temer que se pueda producir una catástrofe nuclear que potencialmente no afectaría únicamente a Ucrania. Desde fines de julio Moscú y Kiev se vienen acusando mutuamente de bombardear la zona, aunque ambos bandos coinciden en que los niveles de radiación siguen siendo normales.