El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) creó la Mesa Estratégica de Cannabis y Cáñamo Industrial en el marco de la Ley Nacional de Cannabis y Cáñamo para uso industrial, que busca regular la producción y comercialización nacional, así como la exportación de cannabis con fines medicinales.
Así lo informó el Gobierno nacional a través de la Resolución 454/2022 publicada en la última edición del Boletín Oficial y firmada por Diana Guillen, presidenta actual del ente autárquico responsable.
La Mesa será parte de la Unidad Presidencial del SENASA y tendrá como principal objetivo gestionar las aristas “novedosas y complejas” de la temática. Estará conformada por un representante de la Dirección Nacional de Protección Vegetal, uno de la Dirección Nacional de Sanidad Animal, uno de la Dirección Nacional de Inocuidad y Calidad Agroalimentaria, otro de la Dirección Nacional de Operaciones y uno más de la Dirección General de Laboratorios y Control Técnico.
Además, tendrá un responsable propio que se encargará de “la articulación con todas las áreas del SENASA y la supervisión de las tareas del equipo de trabajo de dicha Mesa; así como también la coordinación de las acciones con otros organismos, consejos, universidades competentes en la materia y con todas aquellas instituciones que puedan ser relevantes en el desarrollo del sector, especialmente con el Instituto Nacional de Semillas (INASE), para la elaboración de marcos y programas comunes de colaboración que permitan el desarrollo de la fiscalización y control en esta industria”.
La máxima autoridad de la Mesa será Diego Ezequiel Peña, quien “reúne las condiciones necesarias de capacidad, idoneidad y experiencia para cumplir dicho cometido”. Además, la misma no tendrá una extensión del presupuesto ni estructura propia, sino que deberá adaptarse dentro de los límites del SENASA.
Qué dice la Ley de Cannabis y Cáñamo Industrial
El primer artículo de la norma sostiene que la sanidad de los animales y los vegetales son cuestiones de interés nacional, así como lo son la prevención, el control y la erradicación de las enfermedades y de las plagas que afecten la producción silvo-agropecuaria, incluyendo la calidad de las materias primas, de los agroalimentos y los insumos agropecuarios.
También, en términos socioambientales, la entidad destaca la importancia de controlar los residuos químicos y contaminantes químicos y microbiológicos en los alimentos y el comercio nacional e internacional de dichos productos y subproductos.
De esta manera, son responsables de cumplir estos puntos quienes, a nivel particular o jurídico, tengan un espacio de autoridad dentro de la cadena agroalimentaria y deberán “velar y responder por la sanidad, inocuidad, higiene y calidad de su producción, de conformidad a la normativa vigente y a la que en el futuro se establezca”.
Con esta medida, el SENASA busca explotar “las potencialidades que giran en torno al desarrollo como una nueva cadena de valor” sobre el universo del cannabis de uso medicinal y el cáñamo industrial. Por este motivo, se promoverán más tareas, se coordinarán nuevas unidades organizativas que intervendrán en políticas de la materia y se desarrollarán acciones en el marco de los programas y lineamientos establecidos en las distintas Direcciones Nacionales y en la Dirección General de Laboratorios y Control Técnico.
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