El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, favorito para ganar las elecciones del 2 de octubre, dijo este lunes en una rueda con periodistas extranjeros que tiene la "certeza" de que el actual mandatario, Jair Bolsonaro, "acatará" el resultado de los comicios, a pesar de los cuestionamientos que viene realizando al sistema electoral. 

Lula recordó que en la historia democrática de Brasil nunca pasó que un candidato derrotado no haya reconocido los resultados de las elecciones. Sin embargo, volvió a criticar las actitudes que ha tenido Bolsonaro en los últimos meses: “Nunca estuvo tan cristalizado en Brasil quién es quién”, aludió. 

En cuanto al tono crispado de la campaña, el líder izquierdista dijo que en las anteriores nunca vinculó “cuestiones personales” de otros candidatos en la disputa política. “Cuando hablan sobre las esposas de los candidatos es porque no tienen de qué hablar. Mi familia sufre esos ataques desde hace mucho tiempo”, dijo. “Lo importante es tener una elección civilizada, que esté guiada por la esperanza y propuestas para que Brasil sea un mejor país”, agregó.

Combate a la deforestación de la Amazonia

Lula se comprometió a un establecer prioridades en materia de cambio climático “como nunca se hicieron” y prometió “recuperar inmediatamente todos los instrumentos” que existían para combatir la deforestación de la Amazonia

“Vamos a recuperar el Ibama (Instituto Brasileño de Medio Ambiente) que fue desmontado, y vamos a crear un ministerio de los pueblos originarios”, aseguró. 

“Brasil tiene un potencial extraordinario para recuperar el prestigio internacional, necesitamos discutir una nueva gobernanza mundial. Es necesario entender la nueva geopolítica y discutir los temas climáticos”, señaló.

Acuerdo entre Mercosur y la Unión Europea

Consultado sobre el acuerdo comercial entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur, Lula aseguró que de ser elegido volverá a plantear su discusión a los socios de la región.

Pese a ser anunciado en 2019, tras 20 años de negociaciones, el acuerdo aún no entró en vigencia porque depende de una serie de medidas, entre ellas la aprobación del texto por los parlamentos de todos los países involucrados. 

Entre las medidas previstas por el acuerdo se encuentran la desgravación del 91% de los productos que la UE exporta al Mercosur y, en sentido contrario, la desgravación del 92% de los productos que el Mercosur exporta a la UE, ambos durante un período de 10 años. 

Lula señaló que Brasil pasó por un proceso de desindustrialización en los últimos años y que su estrategia económica pretende adoptar medidas para recuperar la importancia de la industria en la economía nacional. A juicio del candidato del Partido de los Trabajadores (PT), el acuerdo firmado entre la UE y el Mercosur podría perjudicar este proceso de reindustrialización de Brasil.

“El acuerdo no es válido porque ni siquiera se implementó en su totalidad. Brasil no está obligado a aceptar un acuerdo que no respete lo que Brasil quiere. Lo que queremos es sentarnos con la UE y discutir, dependiendo de las necesidades de la UE y las nuestras, los derechos que tiene cada uno”, dijo.

“Creo que la negociación tiene que ser algo donde todos ganen, no puede ser algo donde uno gana y otro no. Lo que queremos en la discusión europea es no renunciar a nuestro interés por reindustrializarnos”, añadió.

Fin a la guerra entre Ucrania y Rusia

Luego, el expresidente dijo que su eventual gobierno trabajará para poner fin a la guerra entre Ucrania y Rusia. "Si gano las elecciones, espero que la guerra entre Ucrania y Rusia ya haya terminado, de lo contrario haremos un esfuerzo de diálogo para restablecer la paz. No nos interesa ningún tipo de guerra", dijo el líder del PT. 

A principios de mayo, Lula afirmó a la revista Time, la más importante de Estados Unidos, que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, "quiso la guerra" contra Rusia y lo acusó de no haber negociado lo suficiente con el líder ruso, Vladimir Putin, y de montar un "espectáculo" con el conflicto bélico.

"Zelenski es tan responsable por la guerra como Putin, porque en la guerra no hay un solo culpable", dijo. En una extensa entrevista, Lula culpó a las sanciones impuestas a Rusia de la inflación global y dijo que Estados Unidos y la UE debieron haber aceptado la exigencia de Putin de que Ucrania no se incorporara a la OTAN, algo que Moscú ve como una amenaza y que fue uno de los argumentos rusos para invadir a su vecino.

Zelenski "quiso la guerra. Si él no hubiera querido la guerra, habría negociado un poco más. Es así. Yo critiqué a Putin cuando estuve en Ciudad de México y dije que fue un error la invasión", señaló. "Creo que nadie quiere contribuir a la paz. Las personas están estimulando el odio contra Putin. Esto no va a resolver nada. Es preciso estimular un acuerdo, pero hay un estímulo a la confrontación", sentenció.

A raíz de esas declaraciones, el gobierno de Ucrania incluyó al expresidente en una lista de "oradores que promueven narrativas de propaganda rusa". 

El conflicto entre Rusia y Ucrania, que comenzó el 25 de febrero de este año y aún continúa, dejó hasta ahora más de 5.600 civiles muertos y casi 8.000 heridos, según datos de las Naciones Unidas. El miércoles, Ucrania celebrará el día de su independencia, que este año coincide con los seis meses de la invasión rusa.