Al ejercer su "derecho a la defensa" a través de las redes sociales en el marco de la causa de Vialidad, la vicepresidenta Cristina Kirchner mostró chats entre el exsecretario de Obras Públicas, José López, y el empresario Nicolás Caputo, amigo del expresidente Mauricio Macri a quien calificó como "hermano de la vida", que desnudan los vínculos del exfuncionario con los empresarios macristas ligados a la obra pública.
En este sentido, la expresidenta hizo hincapié en el intercambio de mensajes concretos y que denotaban mucha confianza entre el tucumano José López y tres hombres fuertes de la construcción: Nicolás Caputo, Juan Chediack y Eduardo Gutiérrez (grupo Farallón).
En los documentos adjuntados se contabilizan 177 comunicaciones entre José López y Eduardo Gutiérrez, 109 con Nicolás Caputo, 86 con Juan Chediack y 6 con Lázaro Báez.
Los negocios en CABA
La titular del Senado se abocó a resaltar el "grado de familiaridad" con el que se trataban el entonces secretario de Obras Públicas y Caputo, un empresario del riñón de Mauricio Macri: hablaban tanto de obras en construcción, como de pagos de las mismas y asuntos personales. Tras advertir el vínculo entre ambos, Cristina Kirchner expresó: "Me siento muy boluda yo".
Los negocios entre López y el macrismo aparecen en el ámbito porteño, donde se observa que el exsecretario de Obras Públicas le pide a Caputo que gestione pagos del Instituto de la Vivienda de la Ciudad de Buenos Aires (IVC), dependiente en su momento de quien era el Jefe de Gobierno, Mauricio Macri, bajo cuya gestión Horacio Rodríguez Larreta era el jefe de Gabinete.
"Hola, ¿podrías decirle al IVC que paguen Castañares? Le enviamos los fondos y no pagaron y mañana habrá problemas en la obra, Gracias", es el mensaje que López le envió en 2015 a Caputo, quien a los minutos le responde: "Ya está, lo harán. Igual necesitamos que ellos refuercen los papeles, les falta de todo".
"¿Qué hacía Caputo, un empresario de la construcción, manejando y ordenando pagos del IVC? ¿Viste? Flojitos de papeles cobraron igual… con la tuya contribuyente", exclamó Cristina Kirchner a través de su cuenta de Twitter.
Sobre este punto, también precisó que Emilio Basavilbaso era el presidente del IVC que recibía las órdenes de Caputo, quien durante la presidencia de Mauricio Macri quedó a cargo del FGS del ANSES que tiene acciones en las empresas de Caputo y Magnetto, y que hoy es es Chief Operating Officer (COO) del Grupo Clarín. "Todo hace juego con todo", sentenció la expresidenta.
Además, mostró y leyó gran cantidad de mensajes entre López y el empresario Caputo por distintas obras en 2013. “Fue por la obra del soterramiento del tren Sarmiento", explicó, y agregó: “una obra que se licitó en nuestra gestión y la gana IECSA, la empresa de Calcaterra que en realidad era de Macri”.
La vicepresidente también denunció que durante el macrismo se incluyó en el presupuesto un gasto de 45 mil millones de pesos para esa obra, cuando la misma venía con financiamiento por las empresas contratistas del exterior. “Es curioso que ningún fiscal haya visto esto. El teléfono (de López) pasó por muchos jueces”, apuntó.
El último registro de chats entre López y Caputo habría sido el 13 de agosto de 2015, un día antes de las PASO que ganó Macri y quedó como candidato presidencial de Cambiemos.
La fiscalía miró para un costado
"¿No les llamó la atención este grado de familiaridad con Nicolás Caputo del secretario de Obras Públicas que es miembro de la asociación ilícita de la que yo soy jefa? ¿No les llamó la atención a (los fiscales Diego) Luciani y (Sergio) Mola? ¿A los jueces del Tribunal tampoco? Notable, eh, notable", cuestionó en otra parte de su exposición.
E ironizó: "Era todo un drama cuando hablaban, si llamaban a un fijo o a un celular. Yo no sé qué tenía que hablar esta gente que no quería que la escuchen". Ante ello, la vicepresidenta consideró que la causa de los bolsos de José López "era el caso para poder investigar la corrupción" por su vínculo con el trío de empresarios de la construcción.
"Si había un caso en la Argentina para poder investigar la corrupción en general, pero en particular en materia de obra pública, era éste: el de José López revoleando los bolsos con 9 millones de dólares en el convento", señaló la titular del Senado.
Y reparó sobre el rol de la Justicia: "¿Nadie investigó esto? ¿Saben por qué cuando empezaron a tirar del ovillo de esto pararon? Porque aparecieron ellos con el ovillo, los macristas. Cuando el fiscal Luciani dice 'donde uno aprieta sale pus': tiene razón, fiscal Luciani, pus de ustedes, los macristas". Es por ello que sostuvo que "Comodoro Py podría haber investigado esto. Pero no les convenía".
Y continuó: "No lo habrá investigado. No lo habrá llamado porque comparte vestuario cuando va a jugar al fútbol en la quinta los Abrojos", propiedad de Macri en el partido de Malvinas Argentinas.
Asimismo, Cristina Kirchner recordó que el juez Carlos Mahiques había pedido el sobreseimiento de los empresarios involucrados en el caso de los bolsos de José López: "La Argentina es un lugar muy particular, acá mueren todas las teorías. El lawfare tiene un escalón superior. En otros países fue para estigmatizar, confundir a los gobiernos populares con asociaciones ilícitas. Acá protegen a los que verdaderamente roban en el país".
"Nada de lo que dijeron los fiscales fue probado. El juicio empieza con la ficción que relataron, durante cinco días los fiscales. No eran acusaciones; era un guión y bastante malo por cierto", afirmó al cuestionar a Luciani y Mola por no investigar las comunicaciones telefónicas entre López y Caputo.
Al criticar el rol judicial, aseveró que "se va a demostrar que además de mentirosos, los fiscales no trabajaron. No leyeron las pruebas que consta de 9 mil fojas".