Este lunes, el Tribunal Oral N°1 condenó a 22 años de prisión a Carlos Alberto Savanz (40), en el marco del juicio que se le seguía por "secuestro, retención y ocultamiento" de M., la niña de 7 años que estuvo desaparecida durante tres días, en marzo de 2021, luego de que el hombre la llevara a pasear en bicicleta. Durante la jornada, declararon como testigos la mamá y la tía de la nena.

Los jueces Fernando Ramírez, Luis Salas y Adrián Pérez Lance sentenciaron a Carlos Savanz a cumplir 22 años de prisión efectiva por considerarlo culpable de los delitos de "retención de un menor de diez años de edad y abuso sexual agravado en grado de tentativa".

"Durante el juicio, se determinó que (Savanz) estaba apto para recibir el proceso, luego de hacerle un examen forense que dio como resultado que él estuvo apto y cuerdo durante el hecho y todo el proceso judicial, por lo cual no era un loquito", afirmó el abogado querellante, Juan Ignacio Monti, en diálogo con Página/12.

Si bien la querella y la fiscalía, a cargo de Guillermo Morosi, habían pedido 30 años de cárcel para el imputado, finalmente el tribunal dispuso una pena menor debido a que "el hombre vivía en una situación de extrema vulnerabilidad" -elemento utilizado por la defensa-, agregó el letrado.

"A la niña le arrebataron su niñez, la arrebataron del seno de su madre y la posibilidad de elegir su sexualidad", sostuvo Monti en su alegato.

El abogado además subrayó que "hubo un respaldo probatorio muy grande", que "el 80 por ciento fue material científico", y que "se utilizó el aporte de las cámaras de monitoreo y la cámara Gesell". Y aseveró: "Este hombre ya había hecho todo lo que tenía ganas, es por eso que le quedaba poco para que la matara".

Respecto a la madre de M., el letrado afirmó que "se recuperó de sus adicciones, gracias a la ayuda que recibió, y mejoró el vínculo tanto con su familia como con la nena". "Quedó comprobado que ella tenía este problema pero que, apenas se dio cuenta que su hija no estaba, la buscó por todos lados hasta encontrarla, lejos de usarla como tarjeta de crédito como se dijo", cerró Monti.

El juicio

Savanz estaba detenido desde el 18 de marzo de 2021. En abril de ese año, el hombre fue procesado en primera instancia y puesto bajo prisión preventiva por la jueza Alejandra Alliaud, a pedido de la fiscal del caso Laura Belloqui, por los delitos de "sustracción, retención u ocultamiento de un menor de edad".

Durante el proceso, el imputado dijo que tenía la intención de llevar a M. "con una familia" que le diera mejores condiciones de vida y afirmó que la madre había aceptado que se fuera con él. Savanz además negó haber abusado sexualmente de la pequeña, pero en sus críticas contra la madre deslizó que "la entregaba por paco".

Si bien la madre y la tía de la niña, testigos en la causa, aceptaron las dificultades económicas que atravesaban en la crianza y manutención de M., remarcaron el afecto y el cuidado que le brindaban, desmitiendo las declaraciones de Savanz.

Alerta Sofía

La causa se inició cuando una tía de la niña denunció que había sido llevada por un hombre a quien conocía, porque en otras oportunidades su madre la había autorizado a pasear con él. M. y su madre, Estela, vivían en el cruce de la autopista Dellepiane y la avenida Escalada, en el barrio porteño de Parque Avellaneda.

"Él le decía a la nena que era linda, que quería ayudarla. Le traía galletitas y regalos, socializaba con ella todo el tiempo", dijo a este diario la prima de Estela, Gabriela Núñez. Y agregó: "El hombre le dijo a M. que le iba a cambiar la bici por una más grande, más linda, pero cuando fuimos al local el dueño nos dijo que ahí no vendían bicicletas".

Tras la denuncia de la desaparición, el Ministerio de Seguridad de la Nación puso en marcha una Sala de Situación y activó el Alerta Sofía, un sistema de búsqueda que difunde, a través de las redes sociales y otros medios de comunicación, información de niñes y adolescentes extraviados.

Tras el intenso rastrillaje en el que participaron varias fuerzas de seguridad, el 18 de marzo de 2021 hallaron a M., cerca de la estación de tren de Luján. La niña se encontraba en Las Heras y Gamboa junto a Savanz, quien desde entonces quedó detenido.