La Fiscalía de Chile citó a declarar para la semana próxima al director general de Carabineros, Ricardo Yáñez, por los delitos contra los derechos humanos perpetrados por la Policía durante el estallido social de 2019; la mayor crisis desde que el país retornó a la democracia en 1990.
Esta investigación, que comenzó en 2019 y que hoy está en manos de la jefa de la Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Metropolitana Centro Norte, Ximena Chong, se centra en el rol de Yáñez cuando era director de la Dirección Nacional de Orden y Seguridad.
Según indicó el medio local El Mercurio, la citación de Yáñez ahora se da en el marco de dos querellas presentadas en 2021 por abogados particulares, para poder atribuir la responsabilidad “de mando” por delitos de omisión en apremios ilegítimos durante la revuelta social.
No es la primera vez que Yáñez declara como imputado; en febrero, cuando se presentó a comparecer, descartó que hubo una política de ataque contra la población civil y aseguró que no hubo ninguna persona fallecida por el accionar de Carabineros.
"Muy por el contrario, las más de 81 instrucciones que impartí fueron en el sentido contrario, esto es, cumplir con los protocolos establecidos, desplegar control es de línea, respetar integridad de detenidos y esto aun en situaciones de agresión a carabineros o en que se hayan visto sobrepasados, por mucho que se haya tenido el interés de recuperar el orden público", explicó para ese entonces Yáñez.
Desde el gobierno
Tras la citación de Yáñez, la secretaria general del gobierno de Chile, Camila Vallejo, informó que desde el gobierno se seguirá “atento al curso de la investigación” y que “el mismo presidente (Gabriel Boric) en la reunión señaló a las fuerzas de orden y seguridad tener la obligación y el mandato de colaborar con la Justicia”.
El estallido social
En octubre de 2019, tras el alza de la tarifa del sistema de transporte público de Santiago, se registró una serie de manifestaciones y disturbios masivos que dejó un saldo de al menos una treintena de muertos y miles de heridos. Esto llevó a la Fiscalía a abrir más de 5.000 causas por delitos cometidos durante las movilizaciones.
Uno de los casos más conocidos del estallido, es el de la ahora senadora de Chile Fabiola Campillai, quien perdió la vista por el impacto de una bala de goma en su cara, disparada por un carabinero. Campillai, que se dirigía hacia su trabajo y no estaba participando de las protestas, sufrió fracturas en el cráneo, por las cuales se tuvo que someter a cirugías de reconstrucción facial, y perdió la vista, el gusto y el olfato.