El presidente de Chile, Gabriel Boric, instó este martes al Parlamento para que tramite de manera “urgente” el proyecto de ley para reducir la jornada laboral a 40 horas semanales que lleva “años estancado”, y anunció diversas modificaciones a la iniciativa.

“Este es un proyecto pro familia que apunta al buen vivir. No me cabe ninguna duda de que estas mejoras son medios indispensables para acercarnos a un nuevo Chile que sea más justo e inclusivo”, afirmó el presidente durante un acto en el palacio La Moneda.

Informó, además, que implementará diversas modificaciones a la iniciativa, como la gradualidad. Eso implica, según dijo, la reducción del horario laboral en un período de cinco años para permitirle a las empresas “adaptarse según su realidad a la nueva jornada”.

“Hay empresas que se han ido adelantando y han demostrado que a veces no se requiere de una ley para avanzar en mejor calidad de vida, sino también la disposición y diálogo social”, agregó.

Por su parte, la secretaria general del gobierno de Chile y una de las impulsoras de este proyecto, Camila Vallejo, sugirió que “es el momento para cumplir la promesa” que surgió cinco años atrás.

Normativa sobre jornadas parciales y excepcionales

Este proyecto establece que la jornada parcial, que actualmente equivale 30 horas semanales, será reducida a 27 horas. Para las jornadas excepcionales, en las que habitualmente se realizan 42 horas, se estableció un límite de 40 horas semanales y en caso de haber horas extras, deberá haber una compensación de tiempo de descanso adicional de nueve días anuales como máximo.

Por último, para el sector de los transportistas, que trabajan un máximo de 180 horas mensuales, el proyecto plantea reducirlas a 160 horas.