La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), instó este martes a la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, a revisar las decisiones sobre el sistema de protección a los periodistas y a “garantizar la independencia y transparencia del gobierno, así como dotarlo de presupuesto y personal calificado para que funcione de manera efectiva”.

A continuación, recordó la decisión que tomó el 12 de agosto la ministra de Derechos Humanos, Natalie Roque, que afectó, entre otras áreas, al Sistema Nacional de Protección (SNP). La medida implicó la salida de 40 defensores de derechos humanos y 14 personas que trabajan en el SNP. Este sistema, instalado en 2015, se encarga de la protección de periodistas, abogados, operadores de la justicia y defensores de los derechos humanos.

Desde la SIP se subrayó que estos despidos “podrían estar motivados por actitudes políticas” y no por “habilidades profesionales y técnicas” lo que profundiza “la deficiencia del sistema en proteger a los periodistas.

“Los sistemas de protección deben estar fundamentados en políticas de Estado, no en medidas gubernamentales”, enfatizó el presidente de la SIP, Jorge Canahuati.

Tras el recorte de personal, el director de la organización internacional de Reporteros Sin Fronteras, vinculada a la defensa de la libertad de expresión, Emmanuel Colombié, rechazó la decisión y aseguró que “es inconcebible y escandaloso que el mecanismo de protección, que ya padece una carencia cruel de recursos financieros, pueda ser desmantelado y quedarse sin más de dos tercios de sus empleados”.

Del mismo modo, el Comité para la Defensa de los Derechos Humanos en Honduras, manifestó su preocupación y alegó que la situación “deja indefensos a los periodistas, abogados y defensores de los derechos humanos”.