Solo con una guitarra acústica, interpretando ocho composiciones de Luis Alberto Spinetta. Despojado de toda electricidad, sin sobregrabaciones y con una guitarra acústica Martin de 1934, Lucio Balduini emprende un viaje en soledad siguiendo los pasos del maestro, para ir hacia lo íntimo, la expresión y el corazón de las canciones. "En su nuevo álbum (Para ir), el guitarrista ratifica su cualidad de innovador y su proyección más allá de los géneros. Lucio Balduini es uno de los artistas más interesantes de la escena musical porteña, aunque fuertemente ligado al jazz, su música es una refrescante propuesta que no se encierra en un género", escribió César Pradines en el diario Clarín. (Hoy a las 21 y 23, en Paraphernalia, Rioja 1070).