China condenó que Estados Unidos haya enviado dos buques de guerra al estrecho de Taiwán y aseguró que la maniobra se trata de una “provocación” que busca “sabotear la paz y la estabilidad de la región”.
El vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores, Zhao Lijian, pidió al país norteamericano que se limite a respetar la política de “una sola China, cuyo único gobierno legítimo es el de Beijing”, declaró en una conferencia de prensa.
Mientras que el Ministerio de Defensa de Taiwán confirmó el paso de los buques estadounidenses en un recorrido de norte a sur y precisó que la situación era "normal".
Por su parte, la Armada norteamericana expresó que la maniobra "demuestra el compromiso de Estados Unidos con una región libre y abierta", y sostuvieron que "las fuerzas armadas estadounidenses vuelan, navegan y operan en cualquier sitio que permita el derecho internacional”.
Se trató de la primera incursión de este tipo desde que el país gobernado por Xi Jinping realizó ejercicios militares alrededor de la isla como respuesta a la visita a Taipéi de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi.
Crece la tensión entre China y Taiwán tras la visita de Nancy Pelosi
A comienzos de agosto, creció la tensión entre China y Taiwán tras la visita a la isla de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi.
Tras la visita de la tercera autoridad electa de más alto rango de Estados Unidos, Pekín reaccionó con ejercicios militares alrededor de la isla durante días. Las maniobras chinas incluyeron el lanzamiento de misiles balísticos en aguas cercanas a Taiwán, una de las rutas navieras más transitadas del mundo.
Taiwán vive bajo la constante amenaza de una invasión por parte de China, que reivindica esta isla como parte de su territorio y promete recuperarla algún día. Estados Unidos, en tanto, reconoce diplomáticamente a Beijing sobre Taipéi, pero mantiene relaciones con Taiwán y apoya el derecho de la isla a decidir su futuro.