El frustrado procedimiento debido al cual el imputado por “asociación ilícita, lavado de activos, defraudación e intermediación financiera no autorizada”, fue trasladado a las instalaciones de la Policía Federal desde el Servicio Penitenciario Provincial de Catamarca, no fue exitoso. De acuerdo a lo informado por el juez que investiga la causa, Edgar "Adhemar" Bacchiani “se negó a colaborar".
Si bien el operativo tenía por objetivo clarificar la situación del CEO de Adhemar Capital, quien se encuentra bajo la figura de prisión preventiva desde fines de abril pasado, lejos estuvo de arrojar buenos resultados para los ahorristas.
Tras el procedimiento, el juez Federal, Miguel Ángel Contreras manifestó a los medios de prensa que “ha resultado un poco frustrante, ya que Bacchiani se negó a hacer la apertura y también se negó a hacer una transferencia de ejemplo con los montos que nosotros dijimos y no por los montos que él proponía. (…) Todavía hay perplejidad”.
El magistrado, al ser consultado por los motivos que esgrimió Bacchiani para esta negativa, explicó que “dijo que ya lo hizo anteriormente, que no lo va a volver a hacer por razones de seguridad, por el temor a hackeos y cosas por el estilo. Nosotros simplemente queríamos corroborar ciertos datos que son ambiguos, lo que corresponde, porque cuando uno hace una pericia o diligencia de este tipo, hay datos técnicos que uno no los llega a entender o comprender. Por eso, yo siempre hablé de que en principio había una suma definida, pero esperaba el informe de los peritos".
"Cuando recibí este informe el día viernes, lo analizamos, vi que había algunas cuestiones que no estaban del todo claras, y me pareció prudente pedir otras explicaciones y darle la posibilidad al señor Bacchiani que nos dijera cuál era el procedimiento para que vamos aclarando las situaciones”, comentó en diálogo con los medios luego del frustrado encuentro.
“Él se negó; incluso dijo que podía hacer una prueba de transferencia, pero se negó a hacerla por los montos que le pedimos que la haga (…) de manera tal que quedó todo allí en esa situación. Seguramente los querellantes hicieron algunos pedidos y los seguirán haciendo, y vamos a resolver qué hacemos en los próximos días, pero en definitiva podemos decir que la diligencia de hoy, lejos de ser ratificatoria y todas aquellas buenas expectativas que se habían generado, por el momento fue frustrante”.
Asimismo, el abogado querellante Diego Figueroa, quien representa a varios damnificados por la financiera de bacchiani, manifestó que todo se trata de “es un juego de Bacchiani, que ha tomado a los sistemas de justicia, los querellantes y, principalmente a los damnificados, a su antojo. La Justicia no se merece esta situación que ha puesto peritos y técnicos a disposición para que pueda simplemente acceder a sus cuentas, demostrar que son de su titularidad y que tiene fondos, y que pueden iniciar los procesos de pagos”.
La semana pasada se constató que Bacchiani cuenta con casi 60 millones de dólares en su cuenta. La cifra alcanzaría para cubrir la devolución del dinero a las personas damnificadas de Catamarca, La Rioja y Tucumán.
Figueroa anticipó por último, que se opondrán a un pedido de prisión domiciliaria, en el caso de que este vuelva a ser presentado por la defensa del acusado.
Hecatombe financiera
Desde hace meses Catamarca atraviesa un mar de incertidumbres, ya que cientos de personas denunciaron haber sido estafadas por financieras que decían invertir en criptomonedas, pero que más tarde, no devolvieron el capital invertido más las correspondientes ganancias prometidas.
Personas que invirtieron los ahorros de su vida, vendieron propiedades, automóviles u otros objetos de valor, siguen reclamando a las financieras, ahora investigadas penalmente por la justicia Federal y Ordinaria, que les entreguen su dinero, aunque sin éxito. En menor número, pero con idénticas acusaciones, Bacchiani es investigado en Córdoba, La Rioja y Tucumán, donde Adhemar tenía sus sucursales.
Bacchiani, quien es la cabeza más visible de estas maniobras fraudulentas junto a otras financieras de este tipo, fue detenido el 22 de abril pasado, momento en que declaró ante la Justicia que su intención era “tradear” para generar las divisas que le permitirían efectuar los pagos a los denunciantes. De todas formas, cada vez que se le concedieron beneficios como prisión domiciliaria o el traslado fuera de su lugar de reclusión para que haga efectivas sus promesas, no se pudo establecer fehacientemente si posee activos en sus cuentas virtuales para afrontar estos pagos.
La incertidumbre generalizada de los estafados y su enojo ante estas “puestas en escena”, se hacen sentir frecuentemente en manifestaciones que toman las calles de la ciudad con caravanas, ruidosos reclamos y hasta la quema de objetos; lo que no impide que la provincia sea el escenario de lo que podría ser la estafa masiva más grande de su historia.