La Confederación General del Trabajo (CGT) expresó su "más profundo repudio" al ataque sufrido por la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y convocó a una reunión para hoy a las 10 en la sede de la central obrera para definir los pasos a seguir, entre los que se evalúa convocar a un paro nacional. La CTA de los Trabajadores ya resolvió llamar a la huelga y anunció que llevará esa postura al encuentro organizado por la CGT.
La conducción de la CGT sostuvo que la "tentativa de magnicidio debe interpelar a todos los dirigentes políticos que día a día tensan el clima social hasta niveles irracionales". En ese marco, anticipó que analizará "urgentemente" los "pasos a seguir en relación a este triste y vergonzoso hecho para la historia de nuestra democracia".
"Este hecho --añadió la central obrera-- no está aislado, sino que guarda directa relación con la ola de violencia que se engendra hacia algunos líderes populares alentada desde muchos sectores de la política y los medios". En este sentido, para la CGT "el odio que emana de la confrontación política en estos momentos exacerba los ánimos de todos y los violentos se expresan sólo con brutalidad, generando episodios gravísimos como el de esta noche". La declaración concluyó con una expresión de "solidaridad con la compañera Cristina".
Por si parte, la CTA de los Trabajadores convocó a un paro nacional activo con movilización en repudio al "intento de magnicidio contra la compañera Cristina Fernández de Kirchner, vicepresidenta de la Nación" y anunció que llevará esa propuesta a una reunión con la CGT para "articular una acción común" del movimiento obrero.
La central obrera que encabeza el diputado nacional Hugo Yasky propondrá la medida de fuerza con cese de actividades y movilización en las calles. Para la CTA, el ataque contra la exmandataria y titular del Senado forma parte de "una embestida salvaje de la derecha más brutal de este país, encarnada en los grandes grupos económicos, el partido judicial y los medios de comunicación masiva".