Ayer, vecinos y vecinas de Cerrillos expresaron nuevamente su rechazo a la instalación de una metalúrgica en el ejido municipal. Esta vez pidieron que el proyecto se traslade a un parque industrial y salga de la zona urbana del municipio. La semana pasada el rechazo al funcionamiento de esta empresa en Cerrillos se hizo escuchar en la audiencia pública no vinculante que convocó la intendenta Yolanda Vega. 

En ambas oportunidades el grupo de vecinos reiteró que el proyecto Planta de Fundición de Metales Ferrosos, de la empresa Metalúrgica Integral Sociedad Anónima (más conocida como Metalnor), presenta irregularidades en su formulación y en su ejecución. Además, afirmaron que empezó a funcionar sin que estuviera aprobado el Estudio de Impacto Ambiental y Social (ElAyS). 

Uno de los voceros vecinales, Eduardo Soria, destacó ante Salta/12 la participación de los vecinos autoconvocados durante la audiencia del miércoles último. Si bien fue no vinculante, aseguró que el espacio permitió "visibilizar nuestro descontento y las irregularidades del expediente que presentó la empresa". 

En ese sentido, instó a la intendenta Vega a que se "haga eco de sus palabras", dado que la jefa comunal aseguró reiteradamente que no iría en contra de los vecinos. Vega tiene la última decisión para aprobar o no la puesta en marcha del proyecto. Esto se debe a que la empresa apeló a la Ley provincial 7070, que otorga a los municipios la posibilidad de otorgar el certificado de aptitud ambiental (CAAM) si la firma presentante da cuenta que tiene acompañamiento técnico en la temática. 

Esta vía no fue la primera opción de Metalnor, puesto que previamente había presentado un estudio de impacto ambiental preliminar en la Secretaría de Ambiente de la provincia, que fue rechazado. Ante la negativa, la empresa recién optó por seguir el trámite directamente con el Ejecutivo municipal.

Además, el inicio de los trámites para obtener el CAAM fue luego que se expresara la oposición de los vecinos y vecinas, cuando advirtieron que la firma había iniciado trabajos en las 42 hectáreas que comprende el proyecto. En 2020 Metalnor inició la construcción de un paredón de 4 metros de alto por casi un kilómetro de largo, que hoy se ubica al frente de las casas de algunas familias cerrillanas.

En estos dos años una parte de esa infraestructura se cayó, lo que generó mayor malestar. Además de que su construcción -a menos de 6 metros de las casas familiares- provocó que el agua de lluvia no pudiera circular de la manera habitual, y hubo inundaciones en los hogares. "Levantaron un paredón de más de tres metros y medio, hay carencia con respecto a la nivelación de las calles, lo que ocasiona que el agua se vaya a nuestras casas", cuestionó el vecino. "Hubo dos fuertes lluvias y no pudimos salir de nuestras casas", agregó. 

En la audiencia pública participó un grupo de casi 30 vecinos y también se presentó un listado con más de 600 firmas de las familias que rechazan el proyecto

"No nos negamos a la creación de ningún puesto de trabajo, sino a la instalación de una empresa justo al frente de nuestros hogares", que además "no siguió las recomendaciones adecuadas y los procedimientos legales que se tendrían que haber hecho desde el día uno", ratificó Soria. Por esto los vecinos y vecinas pidieron que la empresa se vaya de la zona. 

En la audiencia el grupo autoconvocado logró el apoyo de los legisladores locales y provinciales. Antes, el Concejo Deliberante de Cerrillos rechazó la instalación de la planta. Sus ediles señalaron que "en la zona de influencia del proyecto en cuestión residen más de 14.000 personas que se verán afectadas" por la puesta en marcha de la iniciativa. 

En principio los vecinos sólo supieron que la empresa quería un espacio para el depósito de chatarra. No obstante, hace unas semanas se enteraron que el fin era instalar tres hornos de fundición de metales, dos eléctricos y uno a gas.

Fuentes de trabajo vs contaminación 

Aún así, el principal argumento de la empresa es que el proyecto posibilitará la creación de más de 200 puestos de trabajo en los próximos 6 años. Esto si se tiene en cuenta que 50 personas ya fueron convocadas para la construcción del paredón; se anuncia que unas 100 más serán contratadas en los próximos 3 años y otras 100, en lo que resta del período proyectado. 

En ese sentido, Soria aclaró que no están en contra de ningún proyecto que posibilite la creación de fuentes laborales, pero insistió en que la iniciativa debe realizarse en la zona que corresponde, como un parque industrial, y "no justo al frente de mi casa". Incluso recordó que el área de Obras Públicas del propio municipio ordenó que la empresa se abstenga de "realizar obras definitivas", y a pesar de ello, se levantó el paredón. 

"En ningún momento se contó con alguna autorización, sea de Provincia o del municipio, y aún así, se hicieron las cosas", cuestionó el vecino. Y agregó que las irregularidades en la formulación y documentación presentada en el proyecto también fueron dadas a conocer durante la audiencia. A modo de ejemplo, dijo que no se conoce qué maquinarias serán las utilizadas o cuáles son los valores reales del impacto sonoro que ocasionarán algunas maquinarias en los barrios cercanos. 

"Dicen que los mayores impactos sonoros no superarán los 70 decibeles, pero ese dato sólo está detallado en lo que sería el interior de los galpones. Nada se dice de cuál será el impacto fuera de ellos", indicó. Es por eso que los vecinos piden que la obra directamente no se haga en la zona, y afirman que también se generó desconfianza hacia la empresa porque entienden que sigue omitiendo información relevante para los vecinos. 

Otra irregularidad señalada por los vecinos es la falta de claridad sobre cómo será el uso de los servicios, como el agua y la luz. El proyecto "dice que se va a hacer un pozo de agua, pero no se aclara si iban a utilizar las mismas napas que los vecinos", cuestionó el concejal del Frente de Todos Adrián Ustarez, adelantando que de ser así, llegaría un menor caudal de agua para los barrios cercanos a la empresa. Lo mismo pasa con la electricidad, ya que se tendrá que hacer una tirada de alta tensión y "se va a consumir más energía".