El juez de la Sala II del Tribunal de Juicio de la ciudad de Tartagal, Anastasio Vázquez Sgardelis, juzga a Luis Rebilla por el femicidio de Nélida Susana Zerpa, quien tenía 68 años cuando fue asesinada, en octubre del año pasado. La hija de la víctima, María Delgado, pidió que el hombre sea condenado a prisión perpetua. 

Zerpa fue asesinada el 1 de octubre de 2021. Rebilla era su pareja, con quien había convivido desde julio hasta septiembre. El hombre ya había asesinado a otra mujer en 2011, en ese año todavía no se había incorporado al Código Penal la figura del femicidio que contempla la pena de prisión perpetua, por ello en 2021 ya había salido de prisión con beneficios, y cumplía los ultimos meses de la pena con modalidad condicional. 

"Espero una pena ejemplificadora, que se haga visible el femicidio de mi mamá", dijo a Salta/12 la hija de Zerpa. 

Delgado contó que su madre conoció al acusado en la cárcel de Orán, cuando acompañaba a su amiga a ver a su pareja, que cumplía una condena. "Este hombre (Rebilla) trabajaba en la panadería, con la pareja de la amiga. Él se empezó a acercar de a poco. Le conversaba. Le decía que la conocía de antes, de cuando estaba casada con mi papá", relató. "Él le había comentado por qué estaba ahí (en prisión). Él había alegado que en ese momento tenía adicción a bebidas alcohólicas, estaba borracho y la situación se había dado porque encontró a la mujer con otro hombre y en un arranque de bronca la había matado", 

Delgado recordó que le dijo a su madre que no le convencía esa historia. "El tema adicciones no es una excusa para lo que uno hace. Las adicciones terminan de sacar lo peor de lo que sos realmente. Yo le decía que apenas la mire mal, o le quiere levantar la voz, llame a la policía", contó.

Delgado vivía desde 2018 en Tucumán. Recordó que desde el día anterior a que su madre fuera encontrada sin vida, le había llamado la atención que no le contestara mensajes ni llamadas, por eso le pidió a una vecina que tenía las llaves de su vivienda que fuera a verla y no la encontró. 

Contó que luego estuvo toda una madrugada pidiendo a la policía que fueran a verla, pero no lograba que le prestaran atención; no aceptaban tomarle la denuncia a las amigas de su madre que estaban en Tartagal y tampoco le recibían la suya, que debía ser a distancia, porque se encontraba en otra provincia. Alrededor de las 7 de la mañana recién los efectivos aceptaron ir al negocio de su madre, y la encontraron asesinada.

Delgado insistió en que espera justicia por su madre. Contó que recibió contención de la Secretaría de la Mujer de Tucumán con una psicóloga y una trabajadora social, que le tramitó la Ley Brisa, de reparación económica para víctimas colaterales de femicidio, porque ella se encontraba sin trabajo. Tambien dijo que desde el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación la acompañaron y estuvieron en comunicación con la fiscalía de Tartagal para informarle del caso.

María Delgado es querellante en el proceso, con la representación de la defensora oficial de género Andrea Valeria Magadán. 

Para hoy se espera que declaren los últimos testigos, médicos forenses, y luego se producirán los alegatos y se dará a conocer la sentencia.

A través de redes de mujeres, Delgado pidió acompañamiento "en el último día (de juicio), tan importante" para obtener justicia por su madre.