Septiembre es considerado el mes de la educación ya que incluye el Día del Maestro y el Día del Estudiante, entre otras fechas. Estas conmemoraciones, ¿conllevan un feriado nacional?
Según el calendario del Gobierno nacional, ni el Día del Maestro ni el Día del Estudiante son feriados nacionales. No obstante, son dos fechas que posibilitan un freno en el ámbito educativo.
El Día del Maestro se celebra el 11 de septiembre y habilita una jornada de asueto en escuelas primarias, que puede implicar la suspensión de la actividad habitual durante un día o unas horas. De igual manera, este año cae un domingo.
También se habilita una jornada de asueto por el Día del Estudiante, que se celebra el miércoles 21 de septiembre, en coincidencia con el inicio de la primavera. Y solo se interrumpen las clases en las escuelas secundarias.
Por qué se celebra el Día del Maestro
El Día del Maestro se celebra el 11 de septiembre, en conmemoración al fallecimiento de Domingo Faustino Sarmiento (1811-1888). El expresidente de la Nación (1868-1874), impulsor de la idea de que era necesario plantear una ley nacional de educación, es considerado por muchos como “el padre del aula”.
En 1943, en la Primera Conferencia de Ministros y Directores de Educación de las Repúblicas Americanas en Panamá, surgió el proyecto que propuso la conmemoración, la cual pretendía extenderse a todo el continente americano, algo que no prosperó en otros países, pero que sí se aplicó en Argentina desde 1945.
Sarmiento fue el impulsor de la idea de que era necesario plantear una ley nacional de educación, aunque fue bajo el gobierno de Julio A. Roca que se sancionó la Ley N° 1420, que estableció que la educación sea universal, obligatoria, gratuita y laica.
Por qué se celebra el Día del Estudiante
Con la llegada de la primavera, el 21 de septiembre se celebra el Día del Estudiante. Sin embargo, el festejo nada tiene que ver con el cambio de estación sino que conmemora el día que llegaron al país los restos de Sarmiento en 1888, que falleció a sus 77 años en Paraguay, y sus restos fueron inhumados en el Cementerio de la Recoleta 10 días después.
El día comenzó a conmemorarse en 1902 por iniciativa de Salvador Debenedetti, estudiante y presidente del Centro de Estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires.
