"Quiero expresar mi más profundo repudio a esta farsa kirchnerista!!! Somos rehenes de una psicótica. Argentina país inviable". Ese fue el tweet que posteó Felipe Crespo, ex subsecretario de Agricultura Familiar y Desarrollo Territorial del Ministerio de Agricultura de la Nación en la gestión de Macri, y actual secretario de Gobierno de la Municipalidad de Villa Allende, pocas horas después del intento de magnicidio sufrido por Cristina Fernández de Kirchner. En la sesión prevista para hoy martes por la tarde el Concejo Deliberante tratará un repudio a las expresiones de este tipo.
Villa Allende es, junto con Marcos Juárez, una de las dos intendencias con Ejecutivo del PRO en la provincia de Córdoba. Crespo es un referente PRO a nivel local, donde incluso algunos lo mencionan como posible candidato a intendente en las elecciones municipales del año próximo. En medios de prensa se informó que Crespo, luego del polémico tweet, estuvo con la titular del PRO a nivel nacional, Patricia Bullrich (a la que sería muy cercano) el sábado pasado en la Sociedad Rural de Jesús María, donde se fotografiaron juntos, y que el martes pasado estuvo en Marcos Juárez con la ex senadora nacional Laura Rodríguez Machado.
Tras el posteo realizado en la noche del jueves y ante la condena que generó, Crespo borró el tweet y adujo que había sido "una broma de mal gusto".
"Aclaro que por una broma de mal gusto se publicó algo indebido en mi cuenta referido al intento de atentado a la vicepresidente, repudio este acto de violencia y cualquier otro que atente contra la paz social", tuiteó el viernes 2 el funcionario macrista.
No obstante, no es la primera muestra de agresividad que expresa en sus redes sociales, donde podían leerse posteos sobre la "basura kirchnerista" o en los que calificó como "cadáver político" al presidente de la Nación, Alberto Fernández.
En ese contexto, cinco de los nueve concejales de Villa Allende (dos del PJ, uno de la UCR y dos de Juntos por el Cambio) presentaron una nota de repudio al atentado y a las expresiones de Crespo, que hoy martes está previsto tratar en el Concejo Deliberante, según informó Lucía Deón, concejal por el PJ.
También vecinos y vecinas elevaron un petitorio para pedir la remoción del funcionario, y se sumó el lunes una nota de repudio por parte de la Mesa Provincial de Trabajo por los Derechos Humanos de Córdoba, dirigida a la intendenta municipal María Teresa Riu-Cazaux de Vélez.
"Sus declaraciones no se condicen con el convivir tolerante y democrático que necesitamos en estos momentos y que deben ser los valores principales a defender por todos los ciudadanos, y principalmente por los funcionarios públicos. Creemos entonces importante exigir las medidas correspondientes para no dejar pasar por alto la gravedad de estos actos que rozan con el delito y fomentan el odio y la violencia, entendiendo la responsabilidad institucional de su investidura", reza el texto.
"Las expresiones de Crespo son de una violencia institucional enorme, y no se pueden dejar pasar", consideró la concejal Deón. "Por la deshumanización que conllevan al no condenar un atentado, pero también porque provienen de instituciones revalorizadas en la democracia, aunque algunos que ocupan esos cargos no estén siendo democráticos. Si un funcionario rompe las reglas de la democracia, ¿qué queda para los ciudadanos? Se trata de alguien que ocupa un cargo público, y por lo tanto define políticas públicas para la comunidad. Por eso consideramos que tiene que renunciar, ya que viola el sistema democrático", concluyó.