A cuatro días del triunfo el Rechazo en el plebiscito por la nueva Constitución chilena, Felipe Delpin anunció su “decisión irrevocable” de renunciar a la presidencia del partido Demócrata Cristiano (DC).  

A través de un comunicado, el alcalde de la comuna chilena de La Granja señaló: “Fui elegido para encabezar una lista y presidir el partido en un momento crucial para el país, cuando se debatía respecto a una propuesta constitucional que podía reemplazar a la Constitución de Pinochet”.

El domingo 62% de los chilenos rechazó el borrador de una nueva Constitución en un plebiscito que contó con una histórica participación de 86% de los 15 millones de ciudadanos que estaban habilitados para votar.

Delpin recordó que más del 60% del órgano deliberativo del partido optó por apoyar la opción Apruebo, pero que “el pueblo chileno dijo otra cosa, no creyó en el proyecto y lo rechazó”. En este sentido, señaló que el partido debe “analizar esta realidad”, sin renunciar a sus principios de avanzar hacia una Constitución con “estado social de derechos, paridad, integración, respeto al medio ambiente”.

El expresidente de la DC aseguró que sigue sosteniendo “la necesidad de tener una nueva Constitución política que dé cuenta de un nuevo país y una sociedad diversa y desafiante”. Frente a esta tarea, “estarán otros hombres y mujeres de la DC, quienes también, de forma institucional, deberán analizar en su justa medida a quienes no respetando al partido y su militancia se pusieron al margen de sus acuerdos” finalizó.

Tras la victoria del Rechazo, un grupo de 600 dirigentes y militantes de la DC solicitaron la remoción de Delpin, junto con toda la mesa directiva del partido.

"El país se ha pronunciado respecto a la propuesta Constitucional presentada por la Convención Constituyente. El 85% de la ciudadanía se expresó votando este domingo y el 62% apoyó a la opción Rechazo, este es un contundente mensaje de la ciudadanía, donde nos indica que estamos, como partido, en la vereda equivocada de la historia", manifestaron en un comunicado.

Además, apuntaron contra "el tono del debate ocupado por la Directiva”, y detallaron hechos como “caricaturizar a la ciudadanía que estaba por el Rechazo, quitarle el respaldo público a la reforma de quórum de 4/7, permitir pasar al Tribunal Supremo a nuestro expresidente de la República, Eduardo Frei-Ruiz Tagle o expulsar de la Mesa a las Jefaturas de nuestras Bancadas parlamentarias".

Tras el fracaso del borrador de la Constitución, el presidente Gabriel Boric concretó cambios en los principales cargos del gabinete y en su espacio de mayor confianza, el Comité Político.