Manteras Unidas y Manteros Unidos reclaman a la intendenta de la ciudad de Salta, Bettina Romero, que les permitan trabajar tres días durante la semana del Milagro en las peatonales y en el Parque San Martín, lugares de donde fueron retiradxs el año pasado con medidas represivas y punitivas.
Solicitan de esta manera que se les incluya en los beneficios económicos del turismo religioso de estos días, y se les permita vender para mejorar su economía de subsistencia. La interventora de la Subsecretaría de Espacios Públicos, Susana Pontussi, negó la petición y les ofreció ubicarse en el Campo Histórico de la Cruz, pero lxs vendedorxs señalan que allí hay escasa concurrencia.
La referenta de Manteras Unidas, Rosa Girón, dijo a Salta/12 que esperan "un milagro también para los manteros", en el marco de la celebración religiosa por la que peregrinxs y turistas llegan en gran cantidad a la ciudad de Salta. Anunció que se instalarán el 12, 13 y 14 de septiembre pese a la negativa de la Municipalidad capitalina.
Pontussi dijo a Salta/12 que este viernes se reunió con un grupo de manterxs, y reiteró que "no es viable, tampoco en horario de la noche", que regresen a vender en las peatonales y el parque San Martín. Indicó que les pidió que se instalen en el Campo de la Cruz y para el resto de los días les ofrecieron ingresar "a las ferias barriales que son muchas".
Ayer manteros y manteras difundieron un pedido de acompañamiento para ingresar a las peatonales y poder trabajar. "La solidaridad es la ternura de los pueblos", dice el texto replicado en redes sociales. La Mesa de Derechos Humanos de Salta respondió en consecuencia, y denunció "la implacable y sostenida persecución y restricciones a este sector vulnerable y precarizado".
"No vamos a hacer corte ni marcha, vamos a ir ocupar nuestro lugar", anunció Girón, refiriéndose a los lugares que ocupaban con su manta hasta el año pasado. Indicó que ingresarán desde las 22, horario en que los comercios fijos están cerrados. "No vamos a entorpecer, el trabajo 'legal' de los compañeros trabajadores comerciantes", sostuvo. La referenta dijo además que no están en condiciones de trasladarse a Campo La Cruz, y pidió solidaridad al municipio. "Estamos hablando de sobrevivencia diaria”, manifestó. "En Campo la Cruz esta todo vacío, el único día que tienen movimiento es el de la procesión. Si alguien se desplaza hasta allí sería un acontecimiento", añadió.
"A la intendenta no le molesta que seamos pobres, no quiere que estemos en el centro", afirmó Girón para plantear que Romero busca "invisibilizar" y ocultar la pobreza en la ciudad.
"Perseguidxs"
El viernes último Pontussi tensó el intercambio con manteros y manteras, señalándolxs como violentxs. Publicó en su cuenta de facebook: "Recién (se realizaron) tres decomisos en Parque San Martín. Dos policías femeninas fueron agredidas. Pero no debemos ceder ante la prepotencia y la violencia de unos pocos que creen que tienen más derechos que el resto de salteños".
Girón consideró que "la paz social se consigue con inclusión". "Un gobierno tiene que mirar la realidad y cambiarla, pero no con amenazas, como desde octubre. Amenazas que reciben los que tratan de vender almanaques, barbijos. Para el día del niño se han secuestrado juguetes, no sabemos donde está la mercadería, no la devolvieron", denunció.
La referenta señaló que mientras lxs vendedores ambulantes "son perseguidos y se les quita la mercadería", el espacio público "se sigue entregando a las empresas, como tarjeta Naranja, Su Crédito, y al Arzobispado que tiene una confitería con sillas y paraguas, en la avenida Belgrano". "¿Por qué no lo podemos hacer, los que sobrevivimos día a día?", reprochó.
Girón dijo que al igual que otros sectores de la economía que se beneficiarán con la llegada de visitantes a la ciudad, como los hoteles, los restaurantes y comercios, lxs vendedorxs ambulantes necesitan "tener un ingreso". Dijo que están atravesando una situación difícil porque "no entra nadie a la feria social", donde fueron reubicadxs por el municipio luego de sacarlxs del espacio público.
Aunque el municipio realizó un censo a lxs manterxs con promesas de incluirlos laboralmente, Girón destacó que eso hasta el momento no se hizo. Enmarcó su reclamo en el contexto de una provincia que tiene alto desempleo y desocupación.
Vendedorxs con discapacidad
El municipio sí permite a personas con discapacidad que no tienen otros ingresos vender en el espacio público. Girón señaló que les cobran $1.300 para poder hacerlo y que algunxs "no han podido pagar desde mayo", por lo que "están haciendo un plan de pago".
La referenta resaltó la vulnerabilidad de las personas con discapacidad que no pueden salir todos los días a la calle, y destacó el destrato que implica que de lo poco que recaudan por lo que venden le tienen que pagar al municipio. "Si no hay venta la angustia es el doble", señaló.
"Más allá de que cobren alguna ayuda, necesitan alimentación especial, tienen que tener transporte particular muchas veces, porque no se pueden movilizar en colectivo. La intendencia no ha tenido ningún tipo de consideración", sostuvo.
Mujeres y juventud excluidas
Asimismo, Girón destacó que cuando estaban en las peatonales, de 100 vendedorxs ambulantes, 95 eran mujeres. "Muchas son sostenedoras de hogar, han sufrido violencia de género", resaltó.
La referenta recordó que en octubre del año pasado las mujeres fueron reprimidas por la policía y muchas estuvieron detuvieron durante tres días, "acusándonos de atentar contra el orden público y de resistencia a la autoridad. Jamás nos podríamos resistir. Las imágenes son más que evidentes. Hemos sido golpeadas". Indicó que 13 mujeres siguen imputadas, con prohibición de acercarse a las peatonales y el Parque San Martín.
Girón también indicó que lxs manterxs tienen en promedio entre 21 y 35 años de edad, y hay, aunque pocos, adultxs mayores.
"Donde hay una necesidad hay un derecho, ese derecho es sustentarnos. No es para un ahorro ni para comprarnos algo. Por eso hemos pedido tres días apelando a la sensibilidad del gobierno", ratificó.
Discriminación
La referenta planteó que hay un trato discriminatorio del gobierno municipal, y recordó que hicieron una denuncia ante el INADI por los discursos estigmatizantes de la intendenta y sus funcionarixs en el marco del conflicto que se desató por la decisión de impedir la venta ambulante en el microcentro de esta capital y en el Parque San Martín.
Aquella denuncia señalaba una "verdadera campaña de la Intendencia dirigida a desacreditar a todos los vendedores ambulantes de la ciudad", que se hizo "sin miramientos sobre la grave crisis económica" que afecta particularmente a muchas trabajadoras y trabajadores informales.
"No podemos hablar de orden cuando fue todo a base de amedrentamientos o amenazas", dijo Girón.