La popular serie de dibujos animados británica Peppa Pig llegó a la campaña electoral italiana después de que los ultraderechistas Hermanos de Italia (FdI), favoritos de los comicios del 25 de septiembre, pidieran a la televisión pública que no emita un episodio en el que aparece un personaje con dos madres.
La líder de FdI y favorita para ser la próxima ministra del país, Giorgia Meloni, se pronunció en contra del episodio, refiriéndose a que era un tema que se debia tratar en familia y que era un poco pronto para la edad de los niños que miran Peppa Pig, que rondan los tres años. Por su parte, el responsable de cultura del Fdl, Federico Mollicone, le pidió a la Rai que no trasmita el episodio argumentando que no podían aceptar el adoctrinamiento de genero.
Del otro lado, las reacciones del centro de izquierda no se hicieron esperar y tuvieron un tono sarcástico. "¿Pero entonces hay que censurar a Peppa Pig y divulgar sin límites el video de la mujer violada en Piacenza?", se preguntó por su parte el líder del PD, Enrico Letta, al aludir a una grabación de una mujer mientras era agredida sexualmente que Meloni publicó en sus redes sociales hace unas semanas.