La exministra de Economía Felisa Miceli respaldó las primeras medidas adoptadas por Sergio Massa al frente de la cartera de Hacienda. En diálogo con AM750, afirmó que "está dando los pasos necesarios", aunque aclaró: "Quizás no son los que nos gustaría. Lo hace en función de resolver los problemas que dejó Martín Guzmán". 

El comentario de Miceli llega tras la gira del funcionario por Washington, donde, entre otras cosas, mantuvo encuentros con representantes del FMI y con David Lipton, asesor del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos.

El dato más importante de toda su gira es el principio de acuerdo con el Fondo en el que ambas partes acordaron que los equipos técnicos sigan trabajando los próximos días para cerrar la revisión de las metas, que le garatnizará a la Argentina el ingreso de fondos por 4.100 millones de dólares.

Estos dólares salen inmediatamente para pagarle al propio FMI. Si no los tuviésemos, tendríamos una gran presión devaluatoria y faltante de dólares. Si el FMI no aprobaba el desembolso la situación sería más complicada”, comentó al respecto la exministra.

En tanto, sobre las reservas del Banco Central, comentó: “El dólar soja es una medida injusta en términos de distribución. Les da ventajas a quienes ya ganaron. Permitió que ingresen dólares al Banco Central. Pero sabemos bastante poco sobre su destino. Estaría bueno que el Central lo aclare, porque no se ve que las reservas aumenten en la misma proporción que las compras que realiza”.

Para Miceli, es fundamental que, además de estas medidas que apuntan a ordenar la macroeconomía, el Gobierno no descuide la microeconomía: “En esta semana se van a dar los índices de inflación de agosto. Creo que van a ser altos. Hay que ver que pasa durante septiembre. La primera semana vino con bastantes aumentos”.

“Argentina, más allá de las medidas macroeconómicas, tiene que contener un mecanismo que permite multar a las empresas que aumentan porque sí. En la Unión Europea o en los Estados Unidos existen leyes anti monopólicas y se ponen multas muy altas. Aquí la defensa a la competencia no lo hace”, lamentó.

Y añadió: “Acá no sabemos quién es el culpable de los aumentos, pero sí sabemos quién es la víctima: el pueblo. Los salarios están planchados, el dólar quieto, las tarifas sin un gran impacto por la quita de subsidios. ¿Cuál es el motivo por el que las empresas aumentan en dólares un 30 por ciento?

Finalmente, lanzó una crítica sobre el secretario de Comercio, Matías Tombolini: “Tenemos pocas chances de que ocurra este tipo de puesta en marcha de estos mecanismos. El mismo Tombolini dijo que los precios y las empresas se van a mover con libertad. Y que no va a controlar. Ojalá que Massa se ocupe de esto. Porque puede llegar a tener una economía más ordenada en lo macroeconómico pero con una inflación tan fuerte que no se va a notar”.