Se dice del martes 13 que "es un día de mala suerte". Pero lejos de la justificación racional y cartesiana, es por sobre todo un mito y un ritual muy antiguo. Y que abreva de diferentes fuentes como el tarot y el horóscopo, así como también de los mitos griegos y del antiguo testamento hebreo. ¿Mito o histórico ritual con explicación?
Así, el martes 13 es uno de los pocos días del calendario que viene con instrucciones: “No te cases ni te embarques”. Así dice un antiguo y popular refrán, muy extendido en países de todo el mundo, pero en especial en América Latina. La lista de prohibiciones tiene una explicación: son días de mala suerte.
Orígenes múltiples y difusos
Como ocurre con muchos dichos y creencias populares, no existe ningún fundamento científico que avale esta creencia. Los martes 13 no son ni más ni menos propensos a estar marcados por un tinte mufa que el resto del almanaque. Sin embargo, es un dicho muy extendido, que tiene orígenes múltiples y difusos.
En varios sitios del mundo existen hoteles que pasan del piso 12 directamente al 14 y no tienen habitaciones con el número 13. Asimismo, muchas líneas aéreas no incluyen la fila 13. Incluso la banda uruguaya No Te Va Gustar no incluyó en ninguno de sus discos la canción número 13.
Para los supersticiosos, el martes 13 es la peor combinación, ya que el martes es considerado el día de la semana de los malos augurios, mientras que el número 13 representa a la mala suerte en muchas culturas. Sin embargo, para rastrear el origen de esta extendida creencia hay que remitirse a la antigüedad.
Martes 13: un número de mal augurio
En principio, martes es una palabra que deriva del nombre del planeta Marte, que en la Edad Media se consideraba que regía emociones como la agresividad, la energía y la tensión. Por otra parte, Marte es el dios romano de la guerra, por lo cual el día martes, regido por el planeta rojo, es el de la destrucción, la sangre y la violencia.
Asimismo, en la antigua Grecia se creía que Tifón, el temido dios de los vientos huracanados, había nacido según la mitología un martes. También un martes fue el día de la semana en que cayó Constantinopla y el día en el que, según la Biblia, ocurrió la confusión de lenguas de la Torre de Babel.
Por el lado numérico, desde la antigüedad el 13 fue considerado como un número de mal augurio. Se supone que responde a que en la Última Cena de Jesucristo había doce apóstoles que lo acompañaban. Y Judas, quien traiciona a Jesús, es considerado como el número 13.
En diversas culturas y religiones se coincide en que el 13 es el número de la mala suerte. En el Apocalipsis el capítulo 13 se refiere al Anticristo. Según la Kabbalah judía los espíritus malignos eran 13. En el tarot, la carta que corresponde a la muerte es el 13.