El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aceptó la petición de su par colombiano, Gustavo Petro, de que su país sea garante en las negociaciones con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), que se desarrollará en La Habana, Cuba.
“¡Una Vez Más! Venezuela acepta el carácter de garante de las negociaciones y de los acuerdos de Paz en Colombia con el ELN. Pondremos nuestra mejor voluntad por la Paz total del hermano pueblo colombiano, que es la Paz de nuestro país y de todo el continente”, publicó Maduro en su cuenta de Twitter, en la noche de este martes.
Petro le envió una carta oficial al mandatario de Venezuela en la que le pide su “invaluable contribución para el cumplimiento por parte del Estado colombiano de los compromisos adquiridos en la construcción de la paz” en el país.
“Como es de su conocimiento, con la activa participación de la República Bolivariana de Venezuela y otros cinco países en calidad de garantes, se firmó en la ciudad de Caracas en marzo de 2016, un acuerdo y una agenda de diálogos con el ELN, así como en el mes de abril de ese año, unos protocolos, entre ellos el que contempla el retorno a Colombia de la delegación de diálogo de dicha insurgencia, transitando por territorio venezolano”, dice la misiva.
Tras la carta de Petro, enviada luego de una conversación telefónica entre ambos mandatarios, Maduro dijo que Venezuela aceptaba ser garante “como lo hizo el comandante (Hugo) Chávez”, en el proceso de paz.
Las conversaciones de paz con el ELN se iniciaron en 2017, durante el gobierno de Juan Manuel Santos (2010-2018), y fueron suspendidas en 2018 por el expresidente Iván Duque (2018-2022).
Desde que asumió el 7 de agosto, Petro se ha puesto como objetivo lograr la paz con la guerrilla. El 11 de agosto, en Cuba, el gobierno comenzó a explorar la posibilidad de establecer un diálogo con el ELN. En ese mismo país se llevaron adelante las conversaciones que culminaron en un acuerdo entre el gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en 2016.
Los gobiernos de Chile y España se ofrecieron para ayudar en este diálogo.