Expandir el circuito del libro para que sea más democrático, crítico e igualitario. Esta es la propuesta de los organizadores de la 3ª Feria del Libro de Flores, que se realizará este sábado de 15 a 22 horas, gratis y en la calle, en Morón y Artigas. Además de poder revolver los libros de las 174 editoriales que participan en esta edición, la programación incluye charlas y presentaciones con Elisa Loncon, Georgina Orellano, Egdardo Cardozo, Sergio Langer, Esteban Podeti, Fabio Luis Barbosa dos Santos, Bruno Stagnaro, Leandro Barttolotta, Marta Dillon, Liliana Viola, Marco Teruggi y Sonora Cañahuate. Como siempre estará también la tradicional Feria de Artigas, con puestos de indumentaria, artesanías y gastronomía y habrá una zona especial de comics, una feria del libro infantil y un espacio de juegos destinado a las infancias dentro de la Cazona de Flores (Morón 2453), coordinado por Kamishibai Infinito.
Los organizadores de la Feria del Libro de Flores --El colectivo editorial Tinta Limón, el Centro de Formación 24, la distribuidora La Periférica y la Feria de Artigas-- se proponen hacer dos ferias por año: una al comienzo, en marzo, y otra con la llegada de la primavera, en septiembre. “Desde el año pasado decidimos que teníamos que desorganizarnos relativamente para abrir a otras dimensiones del trabajo editorial siguiendo un pulso ‘desprofesionalizador’ -plantea Diego Skliar, de Tinta Limón-. Si la política de las editoriales independientes es la profesionalización, el horizonte es una adaptación funcional a los grandes grupos, donde unos son el semillero del otro. Ante una crisis de espacios de sociabilidad, los libros pueden ir más allá del momento individual de la lectura y propiciar modos de intervenir en la ciudad: producir ocasiones de encuentro, de conversación pública, incluso de fiesta”. La apuesta es una feria callejera, gestada en alianza con actores heterogéneos, con las editoriales como constructoras de agenda pública.
El colectivo editorial Tinta Limón sigue de muy cerca la situación política en Chile desde el estallido de octubre de 2019. Entonces viajaron a Santiago y Valparaíso, conversaron en profundidad con muchas personas que estaban próximas a los hechos y publicaron un libro de entrevistas y fotos sobre lo sucedido: Chile Despertó. La revuelta neoliberal. “El contundente triunfo del Rechazo en el plebiscito de aprobación de la nueva Constitución nos sorprendió, como sorprendió a todo el mundo”, dice Diego Skliar y agrega que las razones de este Rechazo ―cuando un año antes, en el plebiscito de entrada, el 80% de los votantes se pronunciaba a favor de cambiar la Constitución neoliberal impuesta por la dictadura de Pinochet en 1980― no son para nada evidentes. “Un dato insoslayable es que hubo una participación electoral inédita, porque fue una elección obligatoria. En ese marco, el Rechazo tuvo más votos que Boric y Kast juntos en las elecciones presidenciales de fin del año pasado; más votos que el Apruebo en el plebiscito de entrada. ¿Qué nos dice esto? La movilización del estallido era un magma popular bastante difícil de descifrar. El sistema político no lo entiende ni interpela; la izquierda o el progresismo no sabe quiénes son y qué quieren”, advierte uno de los editores de Tinta Limón. “El Rechazo no es más que un momento amargo ―uno más― en una lucha que es larga y continua”, plantea Skliar y asegura que por eso invitaron a la académica y activista Elisa Loncon para conversar sobre estas cuestiones con Marta Dillon.
Brasil autofágico, de Daniel Feldmann y Fabio Luis Barbosa dos Santos, es uno de los libros que se presentará en la Feria, a 15 días de las elecciones presidenciales. “Un triunfo de Lula podría servir de contrapeso democrático a la ‘barbarie’ bolsonarista. La democracia es, indudablemente, un activo y hay diferencias sustanciales en ese plano entre ambos candidatos. Ahora, por el triunfo de Lula abogan las cámaras empresariales brasileñas, el Supremo Tribunal Federal que lo encarceló y luego liberó y hasta los Estados Unidos. Concretamente, Lula hoy ofrece gobernabilidad, consenso para los negocios, no una alternativa transformadora. No apela a la movilización popular, sino a contener al bolsonarismo mediante una amplia alianza en defensa de las instituciones”, explica Skliar y resume la hipótesis de los autores del libro: Bolsonaro, en lugar de aplazar la crisis, “la promueve y la acelera, acentuando un proceso de ‘desocialización autofágica’”. La idea principal es que el lugar de Lula es el de “contener” la crisis estructural que atraviesa la reproducción de la vida y la devastación que produce el neoliberalismo; es “ganar tiempo, pero sin un rumbo definido y con poca posibilidad de éxito”. El editor recuerda que esta misma política de contención desembocó en el golpe a Dilma y en el ascenso de Bolsonaro. “En momentos donde la crisis cobra la forma de guerra, de guerra cotidiana por la sobrevivencia, una guerra cuyas principales víctimas son los pobres, las mujeres y disidencias, ¿ofrece Lula un camino para sustraerse? ¿O la guerra continuará de todos modos?”, se preguntan desde Tinta Limón.
Skliar señala que la combinación de inflación acelerada, deterioro de los ingresos y monopolización de un insumo dolarizado como es el del papel afecta al circuito de venta en librerías, que para funcionar necesita plazos más largos; en particular, las librerías chicas, llevadas adelante por libreros lectores que conocen los catálogos y que son un rasgo central del ecosistema del libro autogestivo. “Una de las consecuencias es la ‘uberización’ del libro que se aceleró durante la pandemia: Mercado Libre es el Amazon local que pone en juego una infraestructura que nadie más puede tener, y se saltea y destruye así las mediaciones tradicionales -advierte Skliar-. Las editoriales buscan por este medio concretar ventas directas, pero pierden a las librerías como espacios de encuentro y visibilización, donde funcionan los libros de fondo, además de las novedades y bestsellers. Estamos en una coyuntura de transformación conservadora donde el desafío de las editoriales independientes, autogestionadas y alternativas es actualizar este circuito en un sentido contrario, es decir, en un sentido expansivo, democráctico, crítico, igualitario”.