Fallo de la Corte
Tras el fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, en el que se resolvió que un trabajador que perdió un juicio laboral por su culpa pague todos los honorarios profesionales que ese proceso ocasionó, no hay nada nuevo, siempre fue así. Se busca asustar a la gente. Esta noticia se está distorsionando a partir del conflicto de base que hay de las acusaciones y los insultos del presidente, pero no hay ninguna novedad. El que pierde un pleito se hace cargo de pagar las costas. Y los trabajadores también.
Este caso llega a la Corte por una interpretación muy especial que hizo un tribunal de la ciudad de Buenos Aires, en un juicio donde el trabajador había perdido el pleito, en el que ni siquiera se había defendido bien, ya que no había ido a las pericias médicas. Ese tribunal le rechazó las pretensiones, como corresponde, e hizo una serie de consideraciones por las cuales expresa que el trabajador nunca tiene que hacerse cargo de las costas del juicio, lo cual es un disparate, porque entonces, por ejemplo, yo inventaría juicios todos los días, los pierdo y me los tienen que pagar a mí. Este extravío de este tribunal de Buenos Aires fue corregido por la Corte, pero no diciendo nada nuevo, porque toda la vida se pagó cuando se pierde un juicio. El que pierde paga costas.
¿Por qué en la práctica muchas veces el trabajador termina no pagando? Porque tienen algunas garantías que hacen que sea difícil cobrarle. Primero porque muchos son insolventes, es decir que no tienen nada para ir a embargarles. Pero además, la vivienda del trabajador es inembargable por una decisión de la Ley de Contrato de Trabajo, y para embargarle un sueldo, sólo lo pueden hacer hasta un máximo de un 20 por ciento por encima de un valor de dos veces del salario mínimo, vital y móvil. ¿Qué objetivo pudo tener la masiva difusión de los grandes medios de esta resolución de la Corte? Asustar a los trabajadores para que al ser despedidos, cosa que está ocurriendo cada vez más seguido, no le inicie juicio a sus patrones.
Jorge Elías