El gobierno y la oposición venezolanos no lograron ayer garantizar el inicio del diálogo que tienen previsto emprender mañana en Caracas, y no en isla Margarita. Además, mientras el chavismo ya se encontraba organizando nuevas movilizaciones callejeras, en el interior de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) se conocía una serie de reclamos que un sector le hacía al otro como condición para iniciar las conversaciones.
A menos de 24 horas para que comience a funcionar la mesa de diálogo, oficialismo y oposición no había logrado aún confirmar sus respectivos representantes en esas negociaciones, ni se habían puesto de acuerdo entre sí sobre el espacio neutral que acordarían para el desarrollo de las conversaciones. Más de una docena de partidos miembros de la alianza le planteó ayer a la Secretaría de la MUD que a esa cita sólo acuda el secretario ejecutivo, Jesús “Chúo” Torrealba, para presentar una lista de condiciones para avanzar en el diálogo.
El grupo de 15 partidos, que forma parte de la veintena de organizaciones políticas que integran la mayor alianza antichavista del país, indicó a través de una misiva que no están dadas las condiciones para un diálogo luego de que las autoridades bloquearan el referendo revocatorio del mandato de Maduro. Las condiciones que proponen son la presencia en las conversaciones de la Organización de Estados Americanos (OEA), y de otros ex mandatarios, y que acudan representaciones de todos los partidos miembros de la MUD y la sociedad civil.También, exigen la liberación de todos los políticos presos, detener las supuestas persecuciones políticas a sus dirigentes y también la apertura de un canal humanitario para permitir el ingreso de medicamentos y alimentos.
Mientras tanto, el chavismo comienza a convocar a sus partidarios para irse a las calles a hacer frente a los opositores e impedir que avancen en sus iniciativas de manifestación callejera organizadas paralelas al diálogo. Los oficialistas tomarán las principales avenidas que dan acceso a la sede del Ejecutivo venezolano para hacer frente a la marcha convocada por la MUD para llegar hasta el Palacio de Miraflores, sede del Gobierno nacional, el próximo jueves. El vicepresidente ejecutivo, Aristóbulo Isturiz, indicó que el chavismo se movilizará hacia la Asamblea Nacional el próximo martes, día en que la oposición debatirá la declaración de “abandono del cargo” de Maduro, para impedir que esta iniciativa, que calificó de golpe de Estado, avance.
Ni gobierno ni oposición confirman su presencia
El diálogo en Venezuela quedó en el aire
Este artículo fue publicado originalmente el día 30 de octubre de 2016