Hubo un 70% de ocupación durante la Fiesta del Milagro, del 13, 14 y 15 de septiembre en Salta, con un impacto económico de $356.849.429. 

La festividad se suspendió en 2020 durante la pandemia, el año pasado siguió con restricciones y tuvo aforo limitado. Recién este año volvió a realizarse con normalidad. Según los números provisorios aportados por el presidente de la Cámara de Turismo, Gustavo Di Mecola, durante esta edición, el 12 de septiembre hubo un 63% ocupacion, mientras que el 13 la ocupación hotelera fue del 70% y el 14, de un 78%. Hubo 7.594 arribos turísticos, y 18.984 pernoctes.

"Se cumplieron las expectativas, lo que esperábamos para estos días, también vino mucha gente que no pudo venir en los anteriores Milagros. Ahora se reunieron más creyentes y también más turistas", dijo Di Mecola a Salta/12.  

"Se trabajó mucho con la Iglesia, con los circuitos de turismo religioso que han ido mejorando día a día. Vamos encontrando un lugar dentro del mercado específico de turismo religioso", dijo el presidente de la Cámara de Turismo. 

Asimismo, indicó que hubo turistas que vinieron principalmente de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y de provincias vecinas.

La Fiesta del Señor y la Virgen del Milagro es la fecha del año que congrega a fieles y peregrinos, un evento que trasciende las fronteras de la provincia y reúne a miles de turistas de la Argentina y de países de la región.

El Ministerio de Turismo y Deportes de Salta destacó el buen nivel de ocupación en los días del Milagro, a pesar de que en el resto del país fueron días laborables. También señaló que aunque el epicentro de la festividad es la ciudad de Salta, "produce un derrame en los principales destinos turísticos que durante los próximos días esperan visitantes que vivirán experiencias diversas con la mejor gastronomía y cultura".

También los Valles Calchaquíes y el Valle de Lerma registraron altas tasas de ocupación como consecuencia de turistas salteños y salteñas que aprovecharon las jornadas no laborables, y de extranjeros y nacionales que por otras circunstancias eligieron a Salta como destino.

"Salta es una de las provincias con más alto grado de religiosidad, con un circuito único de iglesias, tanto en la ciudad de Salta como en el interior, muchas de ellas monumentos históricos, además las fiestas patronales son motivo de movilidad de turistas y fieles", destacaron desde el Ministerio de Turismo. 

La festividad del Milagro se hace en conmemoración de la creencia de la "intercesión milagrosa de la Virgen y la protección del Santo Cristo Crucificado" durante los temblores que azotaron la región en 1692. Desde entonces, cada año los fieles "renuevan su pacto de fidelidad", una gran cantidad de peregrinos y peregrinas caminan cientos de kilómetros hasta la capital, otros llegan a caballo o en bicicleta.