Desde Nueva York
Una carta de una detenida-desaparecida a su hijo nacido en cautiverio, una inmersión en el proceso de Memoria, Verdad y Justicia, y una mención especial a la resistencia pacífica con una foto de una abuela de Plaza de Mayo resumen el recorrido de la muestra fotográfica “ESMA Memoria Argentina para el Mundo” en el Consulado argentino. Es la carta que preparó el Museo Esma para candidatearse como Patrimonio Mundial de la Unesco y que inauguró el presidente Alberto Fernández como parte de su gira en Nueva York.
"Vivimos un tiempo singular donde, una vez más, se renuevan las posiciones más extremas y violentas. En el que el peor fascismo combina con la confusión. Por lo tanto preservar estos sitios para que la memoria colectiva se sostenga es muy importante. El mundo no puede retroceder y no puede volver a admitir que hechos como los que se vivieron en la ESMA puedan volver a suceder", sentenció el Presidente ante una audiencia que incluía desde miembros de organismos de derechos humanos hasta sobrevivientes del ex centro clandestino de detención de la Escuela Mecánica de la Armada, todos vestidos de gala.
La intención de candidatear al Museo como Patrimonio Mundial viene desde el segundo mandato de Cristina Fernández de Kirchner y fue encomendado como prioridad en la agenda de la actual embajadora argentina en la Unesco, Marcela Losardo, quien también participó del evento: "Con esta nominación, Argentina claramente contribuye a la paz mundial y a evitar que tales eventos vuelvan a ocurrir nunca más y en ningún lugar del mundo", aseguró.
Desde el otro lado de la soga que separaba a los funcionarios del público, la gente filmaba y aplaudía emocionada. "Yo tengo mucha expectativa de que esto va a salir, porque es importante y porque es un lugar emblemático", explicaba a PáginaI12 una trabajadora del Consulado Argentino en Nueva York que participó del evento.
El equipo de trabajo del Museo Sitio de Memoria presentó en enero de 2022 el expediente para participar. El Comité del Patrimonio Mundial se expedirá sobre la inclusión del Museo en su Lista en la reunión prevista para junio de 2023 y toma particular relevancia porque no existen dentro del listado de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco muchos sitios de memoria. Entre los más conocidos se encuentran Auschwitz y la isla de Gorée frente a la costa de Senegal que fue el mayor centro de comercio de esclavos de la costa africana.
La muestra
"Este es mi niño. Se llama Sebastián, lo tuve en una clínica en Buenos Aires. Pesó 3,800 kilos, nació con forceps. Nació el 15 de abril, quisiera que lo anotaras vos". La carta de Elizabeth Marcuzzo, una detenida desaparecida que tuvo un hijo en cautiverio, ilustra el módulo que describe el plan sistemático de apropiación de niñas y niños durante la dictadura militar. Es uno de los cinco puntos que eligieron desde el Museo para recorrer la historia de la última dictadura militar en Argentina.
Comienza con una descripción de lo que es el terrorismo de Estado con una especial atención a la apropiación de bebés. Un lugar especial lo tiene la Memoria, Verdad y Justicia, que describe la respuesta del Estado argentino ante el terrorismo de Estado: desde el Nunca Más hasta el Juicio a las Juntas. "1058 personas condenadas, 273 sentencias", resume el panel. También cuenta la historia de la recuperación de la ex- ESMA, desde 2004, cuando el entonces presidente Néstor Kirchner ordenó el desalojo de la armada y la creación de un Espacio para la Memoria y la promoción de los derechos Humanos. Finalmente, ilustra la resistencia pacífica que hicieron las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo.
La exhibición está pensada como itinerante para que pueda llegar a la mayor cantidad de países, y que puedan verla particularmente las misiones de la Unesco que luego formarán parte de la decisión. Se inauguró en Buenos Aires y se quedará en Estados Unidos hasta octubre, como mínimo. "Ya llamó la atención de la comunidad local. La semana que viene vendrá un profesor con chicos de un secundario privado de acá, les contará la historia y luego pasarán la película 1985", cuentan desde la embajada. En la embajada se podrá ver hasta fin de mes y luego se mudará al edificio de las Naciones Unidas en Nueva York, con el objetivo de darle visibilidad de cara a la votación. Para que las torturas y apropiaciones de bebés no sucedan nunca más y en ningún lugar del mundo.