El gobierno de Colombia anunció que Monómeros, una empresa venezolana de fertilizantes radicada en su territorio, volverá a ser controlada por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, luego de haber estado por unos tres años bajo la tutela del líder opositor Juan Guaidó.
"Ratificamos la voluntad del gobierno venezolano en designar una junta directiva" para Monómeros, dijo a la cadena Telesur el superintendente de sociedades de Colombia, Billy Escobar, al término de una reunión en Bogotá con el embajador de Venezuela, Felix Plasencia.
"Los dueños de una empresa tienen la posibilidad de escoger sus directivas. Estamos haciendo un reconocimiento legal de esa situación", enfatizó el encargado de la Superintendencia, que intervino la compañía a fines de 2021 ante un posible desfalco.
A su turno, el embajador venezolano celebró que Monómeros "regresa al poder del pueblo de Venezuela", reseñaron varias agencias de noticias.
Ni Escobar ni Plasencia dieron detalles sobre quiénes integrarán la nueva junta ni cuándo asumirán el control de la empresa.
La petroquímica con sede en el puerto colombiano de Barranquilla (norte) comenzó siendo binacional, pero Venezuela se hizo de su control en 2006.
Bajo el gobierno de Iván Duque (2018-2022), Monómeros estuvo en el centro de las profundas diferencias entre Caracas y Bogotá.
En 2019, Venezuela rompió relaciones con Colombia como respuesta al respaldo de Duque al líder opositor venezolano Juan Guaidó, reconocido por medio centenar de países como presidente interino.
Ese mismo año, el entonces mandatario expropió la compañía a la estatal venezolana Pequiven y cedió su administración a Guaidó.
Empresa quebrada e intervenida
Con la llegada al poder de Petro, el primer presidente de izquierda de Colombia, ambos países retomaron relaciones. El nuevo gobierno se encontró con una empresa prácticamente quebrada e intervenida por la Superintendencia.
El retorno de la compañía a manos de Maduro marca "el final de una componenda negativa para hacer daño (...) a los venezolanos y los colombianos", dijo Plasencia.
La fiscalía de Venezuela emitió en agosto pasado una orden de captura contra 23 "falsos" directivos de la petroquímica que fueron señalados de cometer irregularidades y de buscar la quiebra para rematar la firma.
En 2021 el sindicato de Monómeros denunció un contrato, anulado después del escándalo, para traspasar 60% de las utilidades a una empresa privada panameña, así como pagos por "asesorías" que tildó de "innecesarias".
Antes de caer en desgracia, la compañía suministraba el 37% de los fertilizantes usados en Colombia, que lucha contra una elevada inflación (10,8% interanual) impulsada en buena parte por el aumento en los precios de los insumos agrícolas derivado de la guerra en Ucrania.
En febrero de 2019 Guaidó había concretado una operación similar al anunciar -gracias a una decisión del parlamento venezolano, de mayoría opositora- una nueva junta directiva de Citgo, filial de la petrolera venezolana Pdvesa en Estados Unidos, como parte de la estrategia de asfixiar económicamente al gobierno de Maduro, con la ayuda del entonces presidente estadounidense Donald Trump.