Un grupo de presuntos simpatizantes del gobierno venezolano ingresó ayer a la fuerza a la sede de la Asamblea Nacional (Congreso), generando una gresca que dejó al menos 12 heridos, entre ellos cinco diputados.
El incidente fue precedido del lanzamiento de petardos hacia los jardines del Palacio Federal, luego de que terminara una sesión especial por el día de la Independencia Nacional en la que sólo participaron los diputados de la mayoría opositora. En medio de la explosión de petardos, los diputados se refugiaron en la cámara, pero luego decidieron salir a enfrentar al grupo cuando supieron que había ingresado a los jardines. Los legisladores se involucraron en una golpiza en la cual resultaron heridos Américo de Grazia, Armando Armas y Leonardo Reinoso. El diputado Juan Guaidó dijo que también resultaron heridos sus pares Luis Stefanelli y Winston Flores. Al mismo tiempo, resultaron heridos siete empleados del Legislativo.
De Grazia fue llevado inconsciente a la enfermería con una contusión en la cabeza y varias costillas rotas. Su condición es reservada. Los diputados acusaron al comando de Guardia Nacional (policía militarizada), que tiene la responsabilidad de custodiar la sede legislativa, de permitir el asalto de grupos llamados “colectivos”, que dicen defender al gobierno.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, condenó los incidentes y los calificó de extraños, durante la exhibición militar con motivo del Día de la Independencia realizada ayer. “Han ocurrido unos hechos extraños en la Asamblea. Siempre extraños donde está la oposición. Unos hechos de riñas y violencia. Yo condeno esos hechos, no seré cómplice de esos hechos y he ordenado la investigación para que se haga Justicia. Paz, quiero paz para Venezuela. No acepto violencia de nadie, que se investigue y se diga la verdad”, alegó Maduro. Asimismo, el Ministerio Público informó que designó a un fiscal para investigar el ataque a la Asamblea.
El jefe de la comisión de Política Exterior de la Asamblea, Luis Florido, afirmó: “Los asaltantes venían a asesinar diputados”. Además, cuestionó que la Guardia Nacional desapareciera del recinto para permitir el asalto. “Es esa misma Guardia Nacional que nos reprime cuando marchamos en la manifestaciones, hoy desapareció para que el recinto fuera violado”, afirmó. Por su parte, el líder legislativo Julio Borges calificó el hecho como un episodio vergonzoso e infame que no los intimidará.
“¡Urgente! ¡Grupos paramilitares entran a la AN! ¡Diputados heridos! En las fotos @ArmandoArmas”, afirmó el parlamentario opositor José Manuel Olivares a través de la red social Twitter, en un mensaje que publicó junto a dos fotos en las que puede verse al diputado Armando Armas con sangre en la cabeza y parte de su camisa.
Los instigadores, que estaban en las afueras desde temprano, dijeron que impedirían a los diputados entrar o salir de la cámara, aplicando las mismas protestas conocidas como “trancón” (bloqueo) que utiliza la oposición en las calles de Caracas. “Salimos a defender el Palacio Legislativo, nuestro sitio de trabajo”, dijo el diputado Richard Blanco con la camisa rota, y acusó al alcalde de Caracas, el oficialista Jorge Rodríguez, de pagar a los instigadores del asalto. “La responsabilidad es del coronel (Vladimir) Lugo, de la Guardia Nacional, que permitió el ingreso de estos colectivos con palos, cuchillos, fuegos artificiales a un poder nacional y agredieran a periodistas y diputados. Eso es lo que está pasando en Venezuela”, dijo a su turno el primer vicepresidente de la Asamblea, Freddy Guevara.
En el incidente, los diputados lograron detener a uno de los asaltantes, a quien golpearon y retuvieron un carnet. “A ti te pagan por matar a tus hermanos”, le gritó la diputada Yajaira Forero, quien confirmó que el carnet que le incautaron era de la alcaldía de Caracas.
Luego apareció un comando de soldados que logró despejar los espacios del Legislativo, pero no permitía el ingreso o la salida. Los hechos ocurrieron horas después de que el vicepresidente, Tareck El Aissami, ingresara al palacio legislativo con un grupo de ministros para realizar el acto de apertura del Acta de la Independencia Nacional, lograda el 5 de julio de 1811. Los funcionarios estuvieron acompañados por simpatizantes del gobierno de Maduro, quien impulsa una Asamblea Constituyente que entre sus atribuciones incluye la posibilidad de disolver el cuerpo
legislativo. La oposición había calificado el ingreso del vicepresidente como un asalto a sede legislativa y acusaron a los representantes del gobierno de querer apropiarse de los símbolos de la independencia nacional.
Después de la pelea el Parlamento aprobó la convocatoria a un referendo el próximo 16 de julio para consultar a los venezolanos su rechazo o apoyo a la Asamblea Constituyente impulsada por el gobierno de Maduro. El primer vicepresidente de la Asamblea Nacional, el opositor Freddy Guevara, informó que la decisión fue aprobada “con el quórum reglamentario” para convocar al pueblo de Venezuela para que decida el destino del país.
El parlamentario explicó a periodistas desde la sede de la Asamblea Nacional, que el mecanismo fue invocado de acuerdo a los artículos 5, 70, 71, 333 y 350 de la Constitución venezolana. Específicamente el artículo 71 establece que las materias de especial trascendencia nacional podrán ser sometidas a referendo consultivo por iniciativa del presidente en consejo de ministros, y por acuerdo de la Asamblea Nacional, aprobado por el voto de la mayoría de sus integrantes.
Maduro tachó el martes de inconstitucional cualquier consulta popular impulsada al margen del Poder Electoral y leyó varias disposiciones de la ley para concluir que el Consejo Nacional Electoral (CNE) es el único poder que puede organizar cualquier proceso de votaciones.”Para uno convocar consultas públicas de carácter nacional refrendarias, tipo referéndum, amerita cumplir un conjunto de requisitos y mecanismos constitucionales y nadie puede pretender convocar consultas que tengan carácter vinculante violando la constitución a lo loco,” dijo el presidente.