Los cuatro gremios docentes de la ciudad de Buenos Aires concretarán mañana un paro general en rechazo al “atropello de los derechos laborales” cometidos por el gobierno porteño desde que la educación se convirtió en un eje de campaña para la precandidatura de Horacio Rodríguez Larreta. “Quieren hacerle pagar a los maestros el asueto por el intento de magnicidio contra la vicepresidenta Cristina Kirchner", cuestionó el titular de UTE-Ctera, Eduardo López.
La gota que colmó el vaso de la paciencia de UTE-Ctera, SADOP, ADEMyS y CAMyP fue la decisión unilateral del ministerio comandado por Soledad Acuña de pasar a los sábados las jornadas de capacitación docente, llamadas Espacios para la Mejora Institucional (EMI), que históricamente se hacen los días de semana.
Con esta y otras decisiones tomadas en las últimas semanas, la administración de Juntos por el Cambio cometió un “atropello de los derechos laborales conquistados históricamente por lxs trabajadorxs”, afirmó un comunicado.
El feriado por el atentado a CFK y el oportunismo del PRO
Más allá de los argumentos de la gestión del PRO sobre su supuesta vocación de no hacer que les chiques pierdan días de clase, lo cierto es que el corrimiento de la capacitación a días no laborables para ese gremio fue dispuesto desde que el gobierno nacional decretó un feriado nacional el 2 de septiembre.
“Esto empezó cuando hubo asueto por el intento de magnicidio de Cristina Kirchner. Quieren hacerle pagar a los maestros ese asueto y hacerlos ir los sábados para que ‘recuperen’ ese día que el propio Rodríguez Larreta calificó como ‘perdido’”, afirmó a Página/12 el titular de UTE-Ctera, Eduardo López.
El paro de este jueves “por el respeto a nuestra jornada laboral”, por “salarios que reconozcan nuestro rol de profesionales” y “por espacios de diálogo democráticos” no tendrá una movilización central sino actividades descentralizadas en distintas instituciones educativas, como clases públicas, "semaforazos", asambleas y abrazos a edificios escolares.
“Eligieron como adversarios políticos a lxs docentes"
La medida de fuerza también es producto de un debate dado en plenarios realizados por las distintas entidades gremiales donde, más allá de algunos matices, maestros y maestras rechazaron la decisión de “recuperar” ese feriado. Pero también es consecuencia de una larga serie de “provocaciones” que la gestión de Acuña lanzó en supuesto favor de la educación.
Algunas de ellas son el cambio del diseño curricular, el adelantamiento del ciclo lectivo 2023, el establecimiento de los concursos docentes en días sábados, cuando históricamente se realizan en días laborables (lunes a viernes), y modificación del régimen para titularizaciones.
“Eligieron como adversarios políticos a lxs docentes, que son un sector que no pueden doblegar, comprar ni pisotear”, criticó López y cuestionó la estrategia de Rodríguez Larreta de centralizar medidas en el área de Educación “como eje de su campaña y porque así se lo indican los focus groups”.
“Todo gobierno de derecha ataca a la educación”
El dirigente puntualizó que todas las medidas del gobierno del PRO tomadas contra los docentes tienen una característica: “Todo gobierno de derecha ataca a la educación”.
La educación “es un sector que amplia derechos, promueve el ascenso social y no ve al conocimiento como una mercancía”, sostuvo López. “Por eso –agregó- es lógico que inviertan más en baldosas que en educación. A las baldosas las pueden pisotear, a la educación no”.
A la lista de rechazos y cuestionamientos que los gremios le hicieron a Juntos por el Cambio a la hora de decidir el paro de mañana, se le sumó una larga serie de pedidos: reapertura de una mesa para discutir salarios y aumentos en la cantidad de vacantes “porque 55 mil chicos quedaron afuera” de la escolarización.
También exigen recomposición y ampliación de las prestaciones de la obra social docente, construcción de escuelas en los barrios más desprotegidos, titularización de docentes y ampliación de cargos, asegurar micros para actividades fuera de la escuela y participación en los planes de estudios del nivel terciario, entre algunas.
Todas estas asignaturas pendientes se hacen “mientras el jefe de Gobierno hace conferencias en las que simula que le interesa la educación”, criticó López. “Rodríguez Larreta habla de las escuelas porque así se lo indican los focus groups y porque, claro, todos queremos que los chicos vayan a estudiar; pero él lo hace porque garpa electoralmente”, concluyó.