Los padres de Micaela García, Néstor García y Andrea Lescano, visitaron la sede central de la Universidad Nacional de Salta, en el marco de las incumbencias de Ley Micaela, que establece la capacitación obligatoria en género, y violencia de género, para todas las personas que se desempeñan en la función pública, en los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
A través de talleres, que apuntan a construir una sociedad de iguales “en” y “para” el mundo del trabajo y una sociedad sin violencia de género, el padre y la madre de la joven asesinada en abril de 2017, pretenden garantizar una adecuada aplicación de la legislación nacional, promulgada en enero de 2019. La ley se dio en conmemoración de Micaela García, de 21 años, militante del Movimiento Evita, que fue víctima de femicidio en manos de Sebastián Wagner.
La propuesta de talleres no es casual, sino que responde a la perspectiva que desean llevar adelante para la implementación de la ley. Andrea Lescano aseguró a Salta/12, que esta metodología permite utilizar las bases de la educación popular, desde donde se puede generar un mayor intercambio sobre el tema.
En ese sentido, contó que desde la Fundación Micaela García – “La Negra”, que ambos fundaron, están en la etapa de "mostrar cómo nos parece que se debe implementar la ley". "No solamente con charlas para explicar en qué consiste la ley y por qué, sino más bien, en mostrar que se debe implementar a través de talleres, utilizando a la educación popular", expresó.
Sobre todo, en el ámbito de las universidades, desde donde se suele mantener una enseñanza más tradicional, que tiene a un expositor y a escuchantes. En ese sentido, Lescano dijo que entienden que la metodología que proponen no es una característica de las instituciones de educación superior, pero "venimos a irrumpir también en la enseñanza tradicional".
En abril de 2019 el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) adhirió a la aplicación de la Ley Micaela, y recomendó hacer lo mismo a las universidades públicas que componen la red. En el caso de la Universidad Nacional de Salta, la decisión de sumarse a su implementación fue aprobada por el Consejo Superior el 12 de diciembre de 2019.
Los padres de Micaela apuntan a transformar la metodología de aplicación, pues han evaluado que hay una variedad de modos cuando se pone en la marcha lo que dictamina la legislación. Néstor García contó que hay lugares donde sí se implementa, otros sitios donde han adherido, pero no han impulsado su aplicación de manera constante, o lugares donde se implementa, pero la capacitación únicamente consiste en charlas expositivas, "con poco debate, diálogo y discusión".
"Nos interesa que se utilice la educación popular", afirmó García. Dijo que de esta manera se dan instancias de preguntas en las que las personas asistentes no sólo participan, sino que también "traen sus vivencias y experiencias al ámbito donde se desarrolla la (aplicación de) la ley".
Insistió en que se debe trabajar en la temática, pero sin etiquetar los conceptos previamente. Más bien, enfocar en una conversación más permanente con los asistentes y "sobre el final hacer un resumen con la terminología adecuada de lo que estuvimos trabajando".
En ese sentido, padre y madre reafirmaron que las capacitaciones previstas en la ley, deben ser situadas. "Nosotros si venimos desde nuestro lugar a contar lo que pensamos y el diálogo no se habilita, o si se habilita, es de una manera acotada, nos parece que no surge la problemática local", expresó García, que reiteró la necesidad de habilitar canales de diálogos permanentes para que las personas "hablen de lo que sucede en sus vidas cotidianas".
"Eso es mucho más rico que traer una experiencia de otro lado", manifestó. Además, contó que varios municipios se contactaron con la Fundación para pedir que "nos hagamos cargo" de las capacitaciones, contó que, sin embargo, se les respondió que lo que podían hacer era armar una propuesta que tenga como objetivo la formación de propios capacitadores de cada lugar.
La madre y el padre de Micaela García ya habían visitado Salta y volvieron en esta oportunidad por la gestión de la Asociación del Personal de la Universidad Nacional de Salta (APUNSa), que dirige Stella Mimessi.
Por la mañana, dieron los talleres para el personal no docente. Mientras que por la tarde le tocó el turno a los docentes e investigadores, en este caso con el acompañamiento de la Asociación de Docentes e Investigadores de la Universidad Nacional de Salta (ADIUNSa). En ambas oportunidades, Néstor y Andrea hicieron un repaso de la vida de su hija militante.